Secrets and Masks - dramione *TRADUCCIÓN*✓

55: Infierno en la tierra.

TW; representaciones gráficas de violencia.

31 de marzo;

'Cuando mueres, toda tu vida pasa ante tus ojos'. Eso era lo que mucha gente decía que se suponía que iba a pasar. Respiras por última vez, tu corazón deja de latir y luego... ¿qué? ¿Una luz? ¿Un túnel? Y ¿cuando sales por el otro lado ves pasar toda tu vida ante una pantalla y te desvaneces a negro para siempre?

Hermione supuso que esas palabras estaban destinadas a ser un consuelo, una forma de hacer que la muerte de alguien fuera un poco más fácil, un poco menos dolorosa, pero después de todo lo que había visto durante la guerra, después de todo lo que había hecho, para ella se sentía más como un castigo que una bondad.

Le había preguntado a Harry sobre eso una vez. Ella le había preguntado qué pasó esa vez en el bosque, si vio algo antes de que la piedra de la resurrección lo devolviera a la vida. Él simplemente se rió y dijo: "Nunca me creerías si te lo dijera".

Ella quería saber más después de que le dijera eso, ¡¿cómo podría no querer saber?! La respuesta de Harry había sido tan vaga que planteó más preguntas que respuestas. Pero nunca encontró tiempo para volver a preguntarle al respecto, siempre se dejaba distraer por otra cosa en la guerra.

Y ella se pateó a sí misma por eso ahora.

Supuso que era gracioso, si realmente lo pensaba, que su vida terminará así.

A pesar de que su madre y su padre no sabían nada sobre magos y magia en ese momento, se sintieron muy orgullosos cuando recibió su carta de aceptación en Hogwarts. Recordó cómo al día siguiente la llevaron a la biblioteca local y sacaron todos los libros que hacían referencia a brujas, magia o hechizos, y pasaron todo el fin de semana leyendo juntos, preparándose lo mejor que pudieron para su nueva vida.

Por supuesto, casi todo lo que leían eran tonterías, cuentos y hechos falsos inventados por viejos tontos religiosos y muggles que no sabían nada del mundo sobre el que estaban escribiendo.

Lo único que resultó tener una pizca de verdad fueron los juicios de brujas. Se preguntó qué pensarían sus padres si pudieran verla ahora, atada a un poste, con las manos atadas a la espalda y apunto de morir quemada como una de las brujas de esos viejos libros de texto.

Pero las llamas que Hermione había estado esperando, no dolían como siempre lo hacían en sus pesadillas, no ardían como cuando Voldemort le había mostrado la visión.

Que extraño. Quizás el dolor que había sentido en sus pesadillas le había estado mintiendo. ¿O tal vez el dolor era tan intenso que se desmayó y se adormeció?

No, no, eso no podía ser cierto. Sabía que el fuego estaba allí. Sintió que subía la temperatura. Escuchó las brasas salir de la boca de Narcissa y luego...

Ella escuchó gritos. Lamentos altos y agonizantes que se fundieron juntos para formar una ola gigantesca de dolor. Pero no eran sus gritos. No sonaban como los de ella. No sonaba como su voz en absoluto.

Supuso que el shock podría hacer que pareciera de esa manera, la disociación era una respuesta común al trauma. Supuso que podría haber dejado su cuerpo, que su mente podría haberse desprendido cuando las llamas la golpearon como una forma de procesar lo que le estaba pasando. Eso, o tal vez sus terminaciones nerviosas se habían desintegrado por completo en la explosión y su cuerpo simplemente ya no podía registrar el dolor. Pero si eso fuera cierto, al menos habría sentido las llamas primero, ¿no?

Habría habido un momento, al menos un segundo de inimaginable agonía antes de que ella se adormeciera por completo. Ella estaba segura de eso.

Algo no estaba bien. Algo no tenía sentido.