Secrets and Masks - dramione *TRADUCCIÓN*✓

63: Bajo el cerezo en flor.

11 de abril;

Hermione se preguntó si Harry se había sentido así cuando descubrió que era un Horrocrux.

Eso había sido hace tanto tiempo. Casi se sentía como si no hubiera pasado, como si fuera una historia horrible que le había pasado a otra persona y que Hermione acababa de leer.

Recordó haber estado en las ruinas del gran salón con él cuando se dio cuenta. Recordó haber sentido como si su pecho hubiera sido vaciado mientras lo miraba y cuánto deseaba poder salvarlo. Recordó lo fuerte que se abrazaron porque pensaron que sería la última vez.

Ella no recordaba todo tan claramente. No podía recordar lo que había estado usando o cuáles habían sido sus palabras de despedida, pero ¿su expresión? Eso sí lo recordaba porque, en ese momento, no tenía sentido para ella.

Acababa de descubrir que era un Horrocrux y parecía tranquilo. Sabía lo que significaba y lo que le iba a pasar, pero no parecía asustado o como si quisiera huir. No se había visto molesto o enojado, en cambio, se había visto en paz. Como si ya hubiera aceptado que iba a suceder y no había nada que él o cualquier otra persona pudiera hacer al respecto.

Ella no lo entendió en ese momento, pero ahora sí.

Porque ¿de qué servía enfadarse? Gritar que no era justo y golpear la pared no iba a cambiar el hecho de que para que Voldemort muriera de verdad, Hermione también tenía que morir. Hacerse un ovillo y llorar no iba a cambiar el hecho de que todos los demás iban a vivir, y ella no podría.

En ese primer momento, había estado aterrorizada, pero después de eso, una especie de calma inquietante se apoderó de ella. No había nada que nadie pudiera hacer.

Y ahora que lo sabía, tantos misterios se resolvieron de repente. La forma en que había sentido la magia de Voldemort arrastrándose y enconándose bajo su piel durante meses. La forma en que Voldemort la había mirado cuando ella y Theo se aparecieron en la Mansión Malfoy. Ambas cosas que no había entendido en ese momento, pero ahora sí. Habían sucedido porque ella era un Horrocrux.

La hemorragia nasal que había tenido la semana anterior, debió haberla tenido en el momento exacto en que Harry destruyó el medallón. Una señal de que la magia de Voldemort se estaba debilitando Una advertencia de que su tiempo se estaba acabando...

Qué cosa tan extraña era tener que contemplar su propia mortalidad a los veintitantos años. Siempre supo que la muerte vendría por ella eventualmente, era inevitable, pero ya fuera en el campo de batalla o en el bloque del verdugo, una gran parte de ella siempre había pensado que la guerra le quitaría la vida de una forma u otra.

Hubo un tiempo en que había estado feliz de morir por la Orden, y todavía lo estaba, pero el problema era que había comenzado a querer vivir de nuevo. Por primera vez en una década, podía ver que la guerra estaba terminando y se atrevió a imaginar cómo sería su vida al otro lado de ella.

Había empezado a imaginarse a sí misma sobreviviendo. Se había permitido fantasear con viajar por el mundo con Malfoy, cabalgando sobre el lomo de su dragón yendo de una ciudad a otra. Se había imaginado explorando selvas y ruinas con él durante el día. Había fantaseado con sus noches con él, acurrucados en una cama, una cama, juntos, fumando cigarrillos caros y bebiendo whisky de todos los países que visitaban. Ella había comenzado a querer una vida después de la guerra, había comenzado a querer una vida con él y ahora... Se había ido, así como así, y no había un hechizo en la tierra lo suficientemente fuerte como para deshacerlo.

Hermione era un Horrocrux. Voldemort la había convertido en un Horrocrux. Si lo había hecho intencionalmente o si fue un accidente como el de Harry, en realidad no importaba. No cambió nada. Si Voldemort iba a morir, entonces Hermione también tenía que hacerlo.