Krist se durmió antes que yo. Su respiración era calmada y su cuerpo se encontraba relajado contra el mío. Era cálido, y su nariz hacía el zumbido más mínimo y dulce cuando inhalaba. Su cuerpo en mis brazos se sentía demasiado bien. Era algo a lo que me podía acostumbrar con mucha facilidad.
Tan asustado como eso me hacía sentir, no me podía mover. Conociendo a Krist, se despertaría y me recordaría que era un trasero irritante, y me gritaría por dejar que esto pasara o, peor, trataría de que nunca pasara de nuevo. No era tan estúpido como para tener esperanza, o lo suficientemente fuerte para dejar de sentirme de la manera en que lo hacía. Total, revelación. No era tan rudo, después de todo. No cuando se trataba de Krist.
Mi respiración se hizo más lenta, y mi cuerpo se hundió en el colchón, pero luché contra la fatiga que constantemente me alcanzaba. No quería cerrar mis ojos y perderme incluso un segundo de cómo se sentía tener a Krist tan cerca. Se movió, y me congelé. Sus dedos se presionaron en mi piel, y luego se abrazó contra mí una vez antes de relajarse de nuevo.
Besé su cabello, y apoyé mi mejilla contra su frente. Cerrando mis ojos sólo por un momento, tomé un respiro. Abrí mis ojos de nuevo y ya era de día. Joder. Sabía que no debía hacerlo. Krist se movía, tratando de salirse de debajo de mí. Mis piernas estaban sobre las suyas, y mi brazo aún lo sujetaba.
—Detente, Kitty. Estoy durmiendo —dije, acercándolo más.
Sacó sus piernas, una a la vez, y luego se sentó en la cama y suspiró. Deslicé mi mano sobre la cama, alcanzando las puntas de sus dedos pequeños y delicados. Su espalda estaba hacia mí, y no se dio la vuelta.
—¿Qué pasa, Kitten?
—Voy por un vaso con agua. ¿Quieres algo? —Negué con la cabeza y cerré mis ojos.
Ya sea que él fuera a fingir que no pasó o estuviera enojado, ninguna de las opciones era buena. Krist salió y me quedé acostado un rato, tratando de encontrar la motivación para moverme. Las resacas apestaban, y mi cabeza latía con fuerza. Podía escuchar la profunda y apagada voz de Tay, así que decidí arrastrar mi trasero fuera de la cama.
Mis pies desnudos golpearon contra el suelo de madera mientras caminaba hacia la cocina. Krist estaba de pie en mi camiseta y bóxer, vertiendo jarabe de chocolate en un tazón humeante de avena.
—Eso es asqueroso, Kitty —repliqué, tratando de parpadear el desenfoque fuera de mis ojos.
—Buenos días, también para ti.
—He oído que se aproxima tu cumpleaños. Lo último de tu adolescencia... —Él hizo una mueca, atrapado con la guardia baja.
—Sí... No soy una persona de cumpleaños. Creo que iré a cenar con New o algo así. —Sonrió. —Puedes venir si quieres.
Me encogí de hombros, tratando de pretender que su sonrisa no me había alcanzado. ¡Él me quería allí!
—Está bien. ¿Es de este domingo en ocho?
—Sí. ¿Cuándo es tu cumpleaños?
—No hasta abril. El primero de abril —dije, vertiendo leche sobre el cereal.
—Cállate. —Tomé un bocado, divertido ante su sorpresa.
—No, lo digo en serio.
—¿Tu cumpleaños es el Día de los Inocentes? —Me reí. Esa mirada en su rostro no tenía precio.
—¡Sí! Vas a llegar tarde. Mejor vístete.
—Viajo con New.
Ese pequeño rechazo era mucho más duro de escuchar de lo que debería haber sido. Había estado viajando al campus conmigo, y ¿de pronto iba a viajar con New? Me hacía preguntarme si era por lo que pasó anoche. Probablemente trataba de distanciarse de mí de nuevo, y eso no era más que decepcionante.
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Caminando junto a ti [PERAYA]
Fanfiction❤PAREJA PRINCIPAL: Singto Prachaya x Krist Perawat ❤PAREJA SECUNDARIA: Tay Tawan x New Thitipoom ✨ADVERTENCIAS: NINGUNA ✨LIBRO: 2/5 ✨NÚMERO DE CAPÍTULOS: 28 capítulos + Epílogo