Mi guapo Omega se parece mucho a su madre.

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[ Capítulo 6 ]






Era una mañana cálida de otoño, las cortinas se mecían suavemente y la luz comenzaba ya a entrar por entre ellas. Zhan se removió y abrió los ojos lentamente, envolviendo con piernas y brazos, como cualquier pulpo, la espalda y cuerpo de su castaño. Alzó su mirada al reloj de pared que marcaba las seis de la mañana, hundiendo su nariz en los cabellos de la nuca de Yibo, suspirando e inhalando su fuerte aroma a café de grano y canela, sonriendo suavemente.

Se apoyó en un brazo y se inclinó para mirar el rostro durmiente de su Alfa. Su cabello desordenado en la almohada y los ojos cerrados en un tranquilo sueño. Sus rasgos atractivos, con ese rostro afilado que se suavizaba mucho cuando estaba durmiendo o sonriendo. Lo amaba.

Sonrió y acarició su cabello, notando que había crecido bastante. Yibo suspiró y su nuez de Adán se balanceó. Zhan rió y luego lo atacó, mordiendo y besando el lóbulo de su oreja.

- Nghh~ - Yibo ronroneó y abrió los ojos, volteando un poco su cabeza para mirar a Zhan, su voz rasposa - Hey.

- Hey - sonrió - Te estaba comiendo la oreja.

Yibo sonrió también - ¿Sabe bien?

- Riquísimo~ - tomó sus mejillas y le dio un beso profundo en los labios.

- Mn~

Zhan soltó esos labios y comenzó a besarle el cuello, deslizando sus manos por bajo la polera de Yibo, ronroneando y subiéndose sobre él.

- Mngh~ Zhan-Ge, aún tengo sueño.

- Mn~ Yo voy a seguir comiéndote.

- Bien.- cerró los ojos y dormitó.

Zhan frunció el ceño y le jaló la polera - ¡Wang Yibo! ¡No me ignores, quiero tener sexo!

- Aish, Zhan-Ge~ Déjame dormir un poco más.

- ¡No! - se sentó sobre él y lo miró - Si no se te pone dura, te puedo hacer un trabajito con mi boca - hizo el gesto de felación con su mano y la boca abierta - ¿No quieres?

Yibo se despertó en un dos por tres con la sugerencia, agarrándolo de la cintura y cambiando las posiciones, no necesitando de una felación para estar a tope, arrancar los calzoncillos de Zhan y la sudadera, comiéndoselo y penetrándolo después de prepararlo solo un poco.

- ¡Ahhh! Ahh~ Nghh...

Yibo miró como su Omega se retorcía de placer en el colchón mientras lo penetraba de forma apasionada, con esas piernas largas y hermosas sobre sus hombros, y las manos encajadas en un muslo y la otra en la cintura. Sintiéndose el más pervertido del mundo.

- Joder... - pensó y gruñó sin dejar de mirar esa boca hinchada y roja, con un fino hilo de saliva en las comisuras - No puedo creer que me haya hundido en la lujuria tantas veces con este hombre, no me puedo controlar. Realmente he perdido la cabeza.

- Ahh, amor... Yibo, me vengo~ ¡Nghh!

- Haa~ A la mierda, me rindo - gruñó y se inclinó para besarlo - Este hombre es demasiado hermoso para no dejarme atrapar.

Y se dejó atrapar, hasta que se le hizo tarde para ir a trabajar. 

- Demonios, espero que Jackson ya haya llegado - se puso los zapatos en la entrada y miró a Zhan, el cual lo despedía en la puerta con la ropa interior y una camisa - Zhan-Ge, hay algo de pan y mermelada, también fruta, prepárate el desayuno y usa lo que quieras.

Mi peculiar Omega.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora