Un paseo a la nieve.

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[ Capítulo 56 ]




La historia siguió así.

Xiao Ce'An estaba en su cómodo sofá, viendo el noticiero en ropa interior y un polerón de su esposo que obviamente le quedaba grande, soso y despeinado, comía un poco de arroz y verduras salteadas que había hecho su esposo para almorzar. Tenía los pies estirados sobre la mesa de la sala y el gato que había tenido que cuidar mientras su hermano se recuperaba estaba sobre su hombro, recibiendo un poco de comida de sus palillos y ronroneando junto a su oreja. Hu estaba revisando unos papeles de trabajo en la isla de la cocina después de haber lavado lo utilizado para hacer la comida.

Una mañana totalmente normal en la vida de este matrimonio.

Hu estaba a punto de encender un cigarrillo cuando el timbre del pent-house sonó un par de veces, así que fue a atender. No era anormal que alguno de sus chicos viniera a avisar de alguna llamada, visita o información importante, así que no lo pensó mucho y abrió la puerta.

El huracán Wang Zhan entró gritando.

- ¡DA-GE! ¡¿Dónde estás?! - pasó del Alfa en la puerta y corrió por el pasillo, yendo a la sala mientras buscaba a su hermano - ¡DA-GE!

- ¿Mm?

Ce'An volteó su rostro y el gato en su hombro, también. Al mismo tiempo, cuatro pares de ojos claros y felinos lo miraron. Zhan parpadeó.

- ¿Hay... un gatito en tu hombro?

- Mn, a Cai bao le gusta ese lugar.

- ¿Quién?

- Cai bao, el gato.

Zhan parpadeó confundido de nuevo - ¿El gato se llama Bollo de verduras?

- Sí.

- ¿Por qué?

- Porque le gustan las verduras y se ha puesto gordo como un bollo.

Zhan se quedó en silencio un momento, pensando que era un nombre estúpido para un gato tan bonito, pero después recordó que no era nadie para hablar sobre nombres apropiados para mascotas, y también, recordó la razón por la que estaba aquí justo ahora.

- ¡Da-Ge! Yibo, ese bastardo, ¡me fue infiel!

Ce'An casi se atora con la comida - ¿Qué... dijiste? - dejó su comida sobre el sofá y el gatito comenzó a comer de ahí - Yibo... ¡¿Qué?! ¡¿Te fue infiel?!

- ¡Sí!

- Claro que no lo hice.

Ce'An miró hacia atrás de nuevo y vio al castaño acercarse junto a Hu, el cual cargaba a los abrigados cachorros de la familia Wang, los cuales de inmediato se bajaron para correr donde su tío y lanzarse a su regazo en el sofá, trepándose por sus piernas.

- ¡A-Bo~!

Ce'An los recibió y acarició mientras seguía viendo a ese matrimonio que adoraba, no entendiendo ni una mierda. ¿Hubo infidelidad o no? ¿Qué estaba pasando? ¿Dónde estaba su arma? Le dispararía en la entrepierna a Yibo si era verdad.

- ¡Lo fuiste! - se cruzó de brazos y lo acusó con el entrecejo fruncido.

- Lo que pasó no cuenta como infidelidad, A-Zhan - se acarició el entrecejo y suspiró.

- ¡Claro que cuenta!

- Momento, ¡Tiempo! - gritó Ce'An con los cachorros sentados en sus piernas aun estiradas - ¿Qué mierda está pasando aquí? - miró a Yibo con el ceño fruncido - ¿Fuiste infiel?

Mi peculiar Omega.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora