- J...Juliett, pensé que estabas en casa. - dije mientras con todas mis fuerzas tomé rápidamente a la chica y la moví a un costado del sillón, para luego ponerme de pie.
- ¿Q...qué mierda estás haciendo? - señaló la mesa, que estaba colmada de drogas.
- Nada Juliett, quedate tranquila, te voy a explicar, vamos. - dije acercándome a ella y tomando sus manos.
- ¡¿Encima de que andas con otras también volviste a drogarte?! - preguntó enfurecida y esquivando mis manos.
- No Juliett, dejame explicarte, vení. - tomé su mano y nos dirigimos hacia fuera, un callejón ubicado al lado.
- ¿Qué vas a explicarme ahora? ¿qué mentira creaste ya? - indagó mientras con sus manos en mi pecho me empujaba.
- Lo que viste fue lo que pasó, esa chica trabaja ahí, no sé quién es, solamente sé que es una fan, quise quitarmela de encima para ir al baño pero no pude, y con respecto a lo otro, no, no me drogué. - expresé en un tono relativamente alto.
Me miró de reojo y caminó hacia la vereda, que estaba repleta de personas que esperaban entrar.
- ¿Todavía crees que yo voy a volver a caer, Juliett? - pregunté mirándola por atrás.
- No, pero si creo que tus amigos te van a. - respondió sin girar.
Suspiré y decidí que lo mejor que podía hacer era irnos de ahí.
- Subí al auto, ya voy. - le extendí las llaves y volví a entrar para despedirme.
- Chicos, me tengo que ir. - afirmé mientras los saludaba con el brazo. - está mi novia y tengo que llevarla.
- Tu novia te tiene atado. - dijo Nethan sonriendo.
Negué con la cabeza rendido y sonreí.
- Otro día nos juntamos en un lugar más tranquilo, donde no haya fans acosadoras. - expresó Lucas riendo.
- Si es posible si, mejor. - dije y luego de saludar, fui hacia el auto.
El viaje de vuelta fue en silencio, pero llegamos rápido. Luego de estacionar, subimos y entramos.
- Perdón. - dijo situada en el balcón.
- Está bien, Juliett. - me acerqué hacia ella y la tomé por la cintura.
- De verdad, lo siento mucho amor. Me preocupo demasiado por vos, no quiero que te vuelva a suceder algo. - colocó su cabeza en mi pecho.
- No volverá a suceder algo, no te preocupes. - aseguré acariciando su cabeza.
- Vamos a dormir amor, tengo sueño. - tomó mi mano y caímos cansados a la cama.
Ahora podría estar borracho, riendo con mis amigos y escuchando música si no fuera por Juliett, pero, estoy bien así.
Amanecí solo en la cama, raro ya que Juliett duerme hasta muy tarde.
- ¿Julliett? ¿estás en la sala? - pregunté en voz alta poniéndome de pie.
- Buen día amor, traje el desayuno de abajo así comemos acá, vení. - escuché desde el comedor.
Me coloqué un pantalón, caminé hacia ella y coloqué un beso en su cabello.
- Gracias Juliett, no tengo ganas de bajar a desayunar.
- De nada amor. - dijo sonriendo.
Abrí las grandes ventanas del balcón, el día estaba radiante, quizá Juliett hoy quiere salir.
Tomé mis cigarrillos, encendí uno y me senté en frente de ella a beber mi café.
- Ah! me olvidé de decirte, llamó tu hermano, por la mañana - expresó raramente sonriendo.
Puta madre, qué quiere ahora.
- ¿Qué quería? - pregunté arrojando la ceniza en su lugar.
