mi sunnie ᎓ sungsun

O39

Ante tantas preocupaciones y noches de desvelos que habían vivido, llegó un evento que los ayudaría a relajarse tal vez un poco de su pequeño bebé.

El celo de Sunoo, el cual llego de imprevisto la noche del viernes.

Sunghoon estaba en la ducha mientras trataba de relajar sus músculos, los días habían pasado sumamente lento desde que su bebé necesitaba más cuidado, aunque debía agradecer que se recuperaba rápido y poco a poco fueron menos las veces que necesitaba el nebulizador.

Pero ahora no pensaba en eso, su pequeño ya estaba bajo cuidado de Jungwon a quien le tenían la mayor de las confianzas.

Y ahora sentía por su cuerpo cosquillear por el entusiasmo que le brindaba saber que pronto estaría fundiéndose en brazos de su amado. Ah, el sexo.

¿Habría manera de expresar por qué el sexo es tan fabuloso?. La manera en la que dos personas se conectan de forma carnal para sustentar sus necesidades corporales, para sentir algunas de las más deliciosas sensaciones. Eso era algo fascinante sin duda alguna.

Aunque eso no se equiparaba a la sensación de unirse con amor, de tener sexo amando, se hacer el puro acto del amor. Podría sonar demasiado romántico tal vez. Pero así lo era. Así lo quería. Sentía por Sunoo un amor tan grande e incomprensible, y una de las mejores cosas que hacía era que jamás daba por un hecho tener a su Omega en su vida, siempre buscaba una y otra vez alguna forma de conquistarlo cada día.

Y eso a Sunoo le encantaba, siempre teniendo sus atenciones, siempre sacando sus sonrisas y una que otra carcajada. Sentir que le pertenecia tanto a una persona y que el amor fuera muy mutuo, era la razón principal por la que disfrutaban de sus encuentros de una manera magnífica.

El alfa salió de la habitación de baño mientras sentía todo su cuerpo palpitar ante la espera, cuando llegó de su trabajo el olor en todo la casa de su Omega lo abatió en demasía, un gruñido salió de su garganta al imaginar a los demás alfa de la casa encargados de distintas áreas oliendo el aroma de SU esposo, por lo que mando que todos se fueran de una manera rápida.

Su cachorrito ya se encontraba con Jungwon, y lo único que vio al entrar a la habitación fueron las mejillas sonrojadas de Sunoo mientras se giraba de un lado a otro de la cama tratando de quitar el dolor que sentía de una forma mágica.

Pero a Sunghoon le dió vergüenza siquiera acercarse en esas fachas así que dejando un rápido beso en el hombro de su Omega, le aviso que en un momento le ayudaría, razón por la cual Sunoo llevo su cabeza a la almohada tratando de taparse, le da mucha pena escuchar esas palabras de su esposo.

Y como su celo recién iniciaba aún no se ponía en ese estado de atrevimiento que justo en este momento ocupaba.

¡Ultra instinto activate ya porfavor!

Cuando Sunghoon salió, recién bañado y oliendo solamente a su delicioso aroma, algo en Sunoo se encendió.

Y entonces estaba esa otra faceta de Sunoo que tanto le gustaba, le encantaba todo él, cuando estaba atrevido, cuando estaba tímido, cuando gustaba de hablar en tercera persona, siempre le ha gustado él, siempre ha sido el.

Sunghoon salió en toalla, sentía de todas formas que cambiarse y ponerse ropa sería una perdida de tiempo. Sunoo al verlo salir de la puerta de mármol inmediatamente se alzó en su lugar quedando recostado en el espaldar de la cama.

Llevaba únicamente una bata de seda color guindo, la cual dejo caer delicadamente sobre sus hombros mientras hacía una mirada sugestiva y dejaba salir el aroma.