18 de abril del 2018
Mordía la tapa de mi bolígrafo mientras miraba al frente, la profesora de religión explicaba a detalle sobre la religión musulmana. Aun no entiendo muy bien el porqué de esta asignatura. No soy atea ni mucho menos religiosa, por lo que me importa muy poco lo que me enseñan aquí. Pero tampoco puedo descuidar mi promedio porque no me interesa.
—con base a lo que explique será el examen que les hare la próxima semana, no será tan difícil, así que por favor repasen—murmuro el profesor.
Y otro examen para la lista. Tengo en este semana y la próxima casi diez exámenes y no he tenido tiempo para estudiar ya que he ayudado a Myers a ponerse al día, lo cual ha sido muy estresante. Cada diez minutos nos poníamos a discutir por cualquier cosa.
La campana sonó dando fin a la clase.
—y no olviden anotarse para la obra de teatro, recuerden que vale puntos para literatura inglesa, artes y música.
Y se fue.
No iba mal en ninguna materia, por lo que no tendría problema con eso. Odio el teatro, es unas de las áreas que nunca va a poder gustarme. ¿había una razón? Si, cuando tenía trece años me toco protagonizar la obra de caperucita roja y en mi última escena una de las luces se cayo justamente a mi lado. Recuerdo alzar mi cabeza y ver como aquella luz se descolgaba de su puesto y empezaba a caer por el aire, cerre mis ojos y sentí que ese momento seria mi final. Pero por suerte un compañero me jalo justo a tiempo y la luz cayo a un lado de mí. Desde entonces evito estar en un escenario y cuando lo estoy, la ansiedad no me dejaba y suelo mirar hacia arriba para prevenir cualquier accidente.
Ahora soy mas feliz viendo desde los asientos a estar en ella. Pero conozco a alguien que se alegrara de oír que están las audiciones abiertas para la obra.
Terminé de recoger mis cosas y salí del salón. En mitad del pasillo me cruce con Heather la cual empezó a hablar acerca de la obra, si, ella es a quien me refiero. Ella es así, le gusta mucho lo que es actuar, cantar y bailar por lo que en cada oportunidad que tiene para hacerlo se anota. A diferencia de Devon o yo, Heather de cierta manera esta obligada a estar en algún club por el tema de su beca.
—deberías anotarte, así me haces compañía—murmuro mientras colocaba su nombre en la hoja colgada en el tablero de avisos.
—no, gracias. Estoy muy bien así—sonreí levemente para después mirar a mi alrededor.
—creo que debes salir de tu zona de confort, ya sabes...tomar nuevos caminos y experimentar—dejo el bolígrafo y me miro.
Sus ojos marrones mostraban un brillo, tal vez está segura de que ganara el protagónico y a decir verdad yo también lo espero. Ya han pasado dos años seguidos en donde siempre le toca hacer del típico árbol, aun no entiendo de por qué ya que ella es muy buena en la actuación.
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Las grietas del corazón (saga corazones: libro 2) BORRADOR
Teen FictionAidée Chester siempre ha Sido la chica con buenas notas, la que muy pocas veces rompe una regla de su casa, la que se preocupa por su físico, la que no se deja humillar o pisotear. De esta manera es Aidée; no es cliché, no es "Distinta" es simplemen...