¿cita?
24 de abril, 2018
—¿para dónde vas vestida así? —la mire de arriba abajo.
Mi hermana vestía de una mini falda de cuadros, su típico top negro y una chaqueta de cuero negro. Sin contar de las botas negras que tenía puestas. A cambio de mi llevaba unos pantalones vaqueros con una camisa negra manga corta. Estaba en mi casa, en la tarde, sin nada que hacer. No me iba a colocar un vestido o ropa super linda cuando solo lo que voy a hacer es vagar por el patio sin meterme a la piscina, porque para mí, el día de hoy estaba haciendo un clima terrible.
—voy a Londres ¿me veo bien?
—sí, pero pareces que vas a una disco.
—pero me veo fabulosa, debería vestirte e ir conmigo.
—no gracias, prefiero mi linda camita y comer pastel de chocolate.
De hecho eso estaba por hacer. Antes de ver a mi hermana tomándose fotos en el espejo grande que tenemos en la sala principal, mi primer parada era ir a la cocina y robar un poco de pastel chocolate el cual es para las visitas. Pero no teníamos visitas así que queria ser un pequeño ratón robando queso en casa ajena.
—Wilson me conto que un chico te pidió tu número, pero que no se lo diste. ¿Por qué? —me miro.
—tan chismoso es Wilson—me cruce de brazos.
—¿Por qué no se lo diste? ¿por lucas?
—no todo gira alrededor de lucas, Rebecca. No se lo di porque me gusta que me busque por cielo, mar y tierra. Me sube un poco el ego.
—te juntas mucho con Devon—murmuro ella.
Su teléfono empezó a sonar y ella no contesto. Termino de mirarse al espejo para irse, sin antes darme un beso en la mejilla dejándome una marca rosada. Iba a tener un día entero la casa sola, ya que Rebecca no iba a estar y mis padres se fueron de viaje. Por lo que podía hacer lo que sea sin que se den cuenta.
Por lo que conecte mi celular con los parlantes de la casa. Y no tarde en colocar mi canción favorita, que por cierto es una de Taylor Swift. Caminaba hacia la cocina para agarrar mi pedazo de pastel como lo tenía planeado hace poco, pero la música fue interrumpida por el tomo de llamada que tengo. Desconecte el celular de la bocinas y conteste.
—¿Aidée?
—sí, habla con ella. ¿Quién es?
—soy Oliver, ¿me recuerdas?
Oh, Oliver
—sí, creo que sí. ¿Cómo encontraste mi número?
—tengo mis métodos, Aidée. Por cierto, ¿te gustaría salir más tarde?
—¿más tarde? ¿a qué hora? Para poder ver si tengo tiempo libre.
Claro que tengo tiempo libre, ya hice todas mis tareas, sin contar que no tenía clases de otra cosa y estaba sola. estaba más que libre, solo que con una pequeña cosita, y es que aún seguía castigada, pero mis padres no se enterarían, ¿verdad?
—a las seis, ¿te parece?
—tienes suerte, no tengo nada que hacer después de la seis—ni antes de la seis.
Él se rio.
—me pasas tu dirección por mensaje
—Hmm claro.
Colgué la llamada y miré la hora, son las una de la tarde, por lo que tenía mucho tiempo. Hasta el momento esta es mi primera cita, no me sentía emocionada, pero creo que empezaría a salir con personas nuevas. Tampoco es que quiera tener novio lo más rápido, pero es bueno conocer a gente nueva y no solo a esclavizarte a estar con los mismo de siempre. No me malentiendan, soy feliz con mis viejos amigos, aun así, necesito conocer a gente nueva y quizás así encuentre a eso que llama ''amor''.
ESTÁS LEYENDO
Las grietas del corazón (saga corazones: libro 2) BORRADOR
Teen FictionAidée Chester siempre ha Sido la chica con buenas notas, la que muy pocas veces rompe una regla de su casa, la que se preocupa por su físico, la que no se deja humillar o pisotear. De esta manera es Aidée; no es cliché, no es "Distinta" es simplemen...