-Estás en tu casa, Lexie.
La morena de ojos azules miró a su alrededor, escaneando cada rincón del apartamento a pesar de que ya había estado allí en alguna ocasión. Mi corazón comenzó a latir con fuerza al ver que no decía nada; que permanecía en silencio a pesar de mis esfuerzos. Nada había conseguido que dijese al menos una palabra.
Era comprensible. Acababa de perder a su hermano; la única persona que le quedaba en el mundo. Y yo acababa de perder a mi mejor amigo, aquel al que consideraba familia. Tenía tantas ganas de llorar como Lexie, a pesar de que se estuviese haciendo la dura. Y yo debía mantenerme fuerte por el bien de ambos.
Le había prometido a Fynn que cuidaría de ella si algún día le pasaba algo; si algún día él no podía estar ahí para hacerlo él mismo. Y así había sido. Después de tanto tiempo, no pudo soportarlo más, y Lexie se había quedado sola en el mundo.
Al menos eso era lo que ella pensaba. Lo podía ver en su mirada, a pesar de que la desviaba todo el rato para no tener que cruzarse con la mía. Lo había hecho en el funeral, en el trayecto en coche, y seguía haciéndolo aún cuando ya estábamos en casa.
Me costaba reconocer a Lexie, a aquella niña que algún día había sido una más de la familia, aquella con la que había pasado tardes de verano en la piscina; su hermano, ella y yo. Tenía diecinueve años y la vida no podía haber sido más cruel con ella. Se me cerraba la garganta y me costaba respirar al imaginar siquiera todo lo que estaría pasando por su cabeza en aquellos instantes. Y yo estaba sin palabras. Al fin y al cabo, ¿qué se dice en una situación así?
-He preparado la habitación del fondo para ti. Si necesitas algo, solo tienes que decírmelo.
Esperé una respuesta por su parte, pero nunca llegó. Se marchó a su cuarto y cerró la puerta de manera silenciosa. Era como si tuviese miedo a molestar, como si le diese vergüenza estar allí, cuando yo me moría por ayudarla.
Se lo había prometido a Fynn cuando ya sabíamos que no había nada que hacer, cuando ya no había manera de que siguiese adelante. Iba a cuidar de Lexie, y lo haría aunque ella no quisiese ser ayudada.
Haría todo lo que hiciese falta para que volviese a ser aquella persona risueña y alegre que algún día había sido. Porque me moría por ver a Lex de vuelta.
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¡Aquí está mi nueva historia, amores!
Y sí, he creado banners para anunciaros quién narrará cada parte o cada capítulo. Es algo sencillito, pero para haberlo hecho yo sola, tampoco está tan mal... JAJAJA
Os juro que llevo mucho tiempo trabajando en la trama de esta historia, y no puedo estar más ilusionada. Tan solo espero que os guste tanto o más que las anteriores.
OS AMO ❤️
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Salvation | Max Verstappen
RomansaLexie acababa de perderlo todo. Era una bomba a punto de explotar. Y Max... Max simplemente estaba dispuesto a hacer hasta lo imposible por verla feliz.