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Instantes atrás me preocupaba porque “Jumi” probablemente lleva mas de 20 minutos esperándome, enojada y probablemente con una amenaza en la punta de sus labios. Pero ahora lo único que llama mi atención es el hecho de como un chico se encuentra a mi costado y que a simple vista no tiene el perfil de ser alguien muy amable, me había dado su sombrillas; pero aún más importante ¿por qué ahora ambos caminábamos bajo el mismo paraguas con un ambiente algo extraño?

No excatamente creamos un atmósfera com tonos románticos, más bien una donde la incomodidad era algo latente entre ambos, pues ser acompañada por un extraño no es exactamente lo que buscas cada que sales del edificio.

Si bien ambos somos extraños, creo que como mínimo estaría bien presentarnos. ¿Cierto?

-Ammm- comenté indecisa- Tu..- suspire- Gracias por…-

-No digas nada- interrumpió- Que te haya brindado “ayuda”-entrecomillo- no significa que tengamos que establecer una conversación en donde me obligue a ser “cortes”- recalcó- Así que mejor dejemos las formalidades de lado-

-Veo que no eres ese tipo de persona- miré al frente- Pero por si deseas hablar de algo sumamente bizarro o por si simplemente te lo preguntas;  me gusta la lluvia- comenté al recordar como aquel chico caminaba despreocupado bajo la lluvia- Es una de las maneras más sencillas de alejarse del trabajo y..-

Escuché un leve “ja” de su parte, ¿Qué significaba aquello?, ¿Por qué se burlaba? ¿Es una burla?

-¿Qué es ese “ja” de tu parte?- comenté- Al parecer es el chiste más gracioso que ha escuchado una persona tan feliz como tú- comenté con sarcasmo- Apuesto a que…-

-No continues- habló-El sarcamo terminó en “una persona tan feliz como tu” no es necesario decir más- ambos nos detuvimos en la esquina- Deja de ser sarcasmo cuando das explicaciones de más- esperamos a que la luz del semáforo cambiará para que continuaramos caminando- Debes de trabajar más en ello-

Bufé y continuamos caminando en cuanto la luz verde cambio a una roja. Una gran cantidad de personas paso a nuestro costado, personas de las cuales no tenía conciencia por que pensé que solo el chico sarcástico y yo nos encontrábamos solos caminando en una avenida de la ciudad.

Más si contamos que es pasada la media noche.

-La lluvia no es el escape de la vida cotidiana- suspiro-  Es el estado constante en el que se encuentra el ser humano. Se centra tanto en sus desgracias que simplemente no vive el presente, no admira las pequeñas cosas que la vida le ofrece por pensar en lo que pudo haber sido- me detuve- ¡Hey!-se quejo.-No te detengas-

-La lluvia no es escape de la vida…- guarde silencio-¿De dónde sacaste eso?- retomé mi caminar- No me digas que eres algún tipo de filósofo o…-

-¿Puedes dejar de juzgar?- comentó con cierto enojo en su voz- Yo no he jusgado el hecho de que eres una persona bastante molesta si te lo propones; y eso que llevo conociéndote…- miró su reloj- 15 minutos-

Bien; al parecer había rebasado mis límites sobre no analizar lo que digo. Debo de ser más cuidadosa con ello creo que el no hablar con personas tan seguido me hace ser un poco….. diferente.

-Lo lamento- susurre- De hecho- pensé un poco- Tu punto de vista sobre esto- miré a mi alrededor- Es un cuanto…-

-Diferente- encogió los hombros- Pero no importa, ya sabes. Es mas facil huir de la verdad para vivir las agridulces mentiras-

Claramente aquello me quedaba como anillo al dedo, puesto que me es más sencillo evitar el hecho de no tener los méritos por mi trabajo para vivir en la agridulce mentira de que puedo trabajar y ser "feliz" con lo que amo.

La música.

-Supongo que sería genial que este sonido se agregará a una canción- me detuve- Una canción como….-

La que esta en algún lugar de mi computador desde que paso lo que paso… aquella vez.

-Bien- sentí su mano tomar la mía para retirarla del mango de la sombrilla- Yo llevaré esto a partir de ahora, así si tú te detienes la única que se mojara seras tú- comenzó a caminar- Te quedaras ahí o…-

-¿Qué piensas acerca de esto?-

-¿Qué como pude brindarte ayuda? Bueno verdaderamente no se porque te ayude, eres molesta pero…-

-Me refiero a la lluvia. Debo de admitir que tu punto de vista me tomó por sorpresa, y más si contamos que básicamente muy pocas cosas suelen sorprenderme-

-Bueno- suspiro- No es solo agua o algún motivo por que deberías correr- señaló a un chico que corría en sentido contrario a nosotros- Solo es un momento- encogió los hombros- Un momento como todos aquellos que sueles vivir, algo pasajero que con el tiempo deja de existir. El tiempo es la clave de dejar de huir. La lluvia es.. Como esto, un momento que me esta haciendo hablar con una completa desconocida. Solo eso-

Chasqueo la lengua no muy convencido y negó.

-Un momento- hablé-Pero si esto dices es “momentáneo” ¿por qué instantes atrás afirmaste que es un estado constante en el que una persona se puede encontrar? Entonces tu afirmación no tendría ningún sentido con esto-

Él solo se limitó a bufar y continuar con la vista al frente.

-No todo siempre tiene sentido-

La ciudad ahora se encontraba sumergida en letreros con luces neón que se difuminaban con la lluvia y los automóviles a gran velocidad, sin contar que el ambiente comenzaba a alijerarse no solamente por el hecho de que lentamente esta dejando de llover, sino que al parecer el chico sarcástico parece haber dejado a un costado el hecho de hablar “francamente” a su peculiar forma de conversar con alguien.

El sonido de mi celular me hizo detenerme para sacarlo de mi bolsillo y mirar un nuevo mensaje en la pantalla.

“Agh. Tardaste demasiado, no sabes lo que significa que yo tenga que invertir un poco de mi tiempo en ti, Espero encontrarte en el estudio a fin de mes, de lo contrario ten por seguro que puedes olvidarte de continuar escribiendo y componiendo para mi.”

Un gran suspiro salió de mis labios. Negué y guarde el celular en mi bolsillo.

-Supongo que ahora debería de correr para alcanzar a…-Detuve mis palabras al ver al chico junto a mi- Pense que tu…-

-¿llegamos?- miró a mis espaldas. Creo que el mesaje llego justo a tiempo. Asentí- Aquí es donde…-

-Trabajo- miré como el chico cerro la sombrilla - Gracias por la conversación y por dejarme aquí, asi que…-

Mantuve mi vista en aquel chico que ahora sujetaba la sombrilla completamente cerrada hacia mi.

¿Qué esta haciendo?

-La tomarás o debo sujetarla más tiempo- la miré confusa- La necesitas más que yo, no me mojare por que a dejado de llover y no soy una persona que salga mucho así que…-giró un poco la sombrilla en forma de juego y me la dió de nuevo- Además no quiero cargar algo de regreso al edificio-

La tomé. Esto si que era extraño.

-Bien…. Ammmm, gracias….-

No creo que me diga su nombre pero tengo la pequeña esperanza de que si lo haga. Después de todo en los últimos minutos logré que hablara de manera diferente a la inicial.

Bufó.

-Min-

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