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Tic, tic, tic, tic. Pop.
Tic, tic, tic, tic. Pop.

Aquello era el único sonido que percibía tan cerca de mis oídos que me es imposible pasarlo por desapercibido y todo a causa de una gotera que había aparecido en el techo a escasos centímetros del escritorio en donde dejo reposando el computador. Por suerte no daño mi viejo computador de lo contrario estaría lamentandome por la pérdida de considerables archivos de gran valor.

Demos.

Muchos demos, pero ninguno de ellos era el que buscaba, llevo más de dos semanas buscando el mismo archivo cuyo nombre y fecha no recuerdo, datos claves que me ayudarían mucho a encontrarla, pero bueno. El punto es que es viernes 24 de octubre y eso… no es algo muy bueno.

-Agh- me quejé quitándome los audífonos- Podrías guardar silencio- miré con enojo aquella grieta en el techo- No puedo concentrarme en esto- señalé el computador- ¡Y debo de admitir que Jumi fue algo comprensiva al dejarme trabajar en casa en ves de estar en el edificio llena de polvo a causa de las remodelaciones!- grité- Agh-

Pasé mis manos por mi cabello dejandolo caer completamente hacía atrás.

El día de hoy no he despertado con el mejor ánimo del mundo, me gustaría pensar que solo no he descansado adecuadamente porque mi vecino es baterista de una banda de rock que se presenta los fines de semana en algun bar donde unas cuantas personas ebrias ven el show que han montado en el transcurso de la semana y que es la causa de que yo no pueda dormir.

Pero no; de hecho el día de hoy al despertar los ladridos del perro de mi nueva vecina que se mudo al departamento de alado fueron el despertador que me hizo abrir los ojos unas 3 horas antes de mi horario habitual, después muy perezosamente camine hacía la cocina para calentar agua y prepararme un té con especias que me recomendo beber “google” ya que al parecer el Dr. Google dice que tomar té es una muy buena manera de relajarse, pero…. No tenía gas. Absurdo, pero cierto. Punto para el mal humor.

No pude tomarme un té así que me resigne, decidí  alistarme y caminar en dirección a la tienda de conveniencia de la esquina para ir por un café pero en cuanto llegué y miré aquellas máquinas dispensadoras con una hoja color amarillo me hizo saber que al menos por hoy no serviría café ya que se encontraba fuera de servicio; Bufé.

Me desperté con los ladridos del perro de mi vecina, No hay té, tampoco café y ahora hay una gotera en mi techo ¿Se me olvida algo? A sí claro, que el edificio esta en remodelación y que además, perdí el tonto demo de la canción principal de Jumi.

Sí, perdí el tonto demo en el que me han obligado a trabajar desde hace 6 meses, ¡6 meses perdidos en 5 segundos! Vaya que hoy no es mi día.

-Bien, Minju no perdamos la cordura- comenté mientras mantenía los ojos cerrados- Todo va a estar bien- inhale- Podemos hacerlo, que tengas un día malo no significa que tengas una mala vida- exhale-

Aunque aquellas palabras de auto apoyo tenían la intención de relajarme, la verdad es que lo único que lograron fue hacerme recordar lo que exactamente hacía de mi vida una mala vida, de hecho creo que mi vida no es exactamente una en la que siempre se irradie felicidad o en donde siempre este dando el 100% de mi, de hecho es bastante común que tenga altibajos, cosa que la mayoría de personas adultas y no tan adultas suele tener. Es parte de la naturaleza humana, después de todo la imperfeccion es lo que la hace interesante.

-No pensemos en ello- abrí mis ojos y negué moviendo mi cabeza- Bien, tal vez sería buena idea comer afuera- caminé hacía el computador lo cerré para después colocarlo en la funda y así guardarlo en el cajón del escritorio- Después de todo no hay gas y el señor Lee es bastante emocional cada que viene a recargar el tanque y hoy- tomé mi cartera para guardarla en mi bolsillo trasero- No tengo ganas de escuchar historias emocionalmente innecesarias-

STAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora