STAY

31.

Dentro de los cosas que muy pocas personas saben de mi es el hecho de que tomo medicamentos controlados para poder conciliar el sueño, soy alguien que con tantas cosas con las que manejar olvida el hecho que también debo de descansar. Un acto que generalmente muchos hacen en automático es básicamente algo obvio y bastante mecánico, ver la cama, el cansancio y finalmente tener un día tan ajetreado puede traer como consecuencia que solo necesites una buena ducha para así descansar.

Pero en mi caso, aquella accion que dicen es la peor gastadera de tiempo en tu vida, pasa a ser un problema serio cuando despues de una semana completa duermes más allá de una hora diaria, por tal hecho y cuando mi padre noto que desde pequeña me costaba trabajo conciliar el sueño; comenzó a medicarme con píldoras tan potentes como para dormir a un animal de gran tamaño. El medicamento consta de una píldora por día justo antes de irme a dormir, píldora que tomo desde los 8 años y que continuo ingiriendo a causa de mi problema con el sueño.

Sin embargo, mi padre me dejó muy en claro que aquellas píldoras traerían consigo consecuencias en un futuro como algunas alusiones o cambios repentinos de ánimo,  por ello es que días después de haber estado con Yoon, me pregunto que fue lo que paso, ya que despues de todo lo unico que logre ver al abrir mis ojos fue encontrarme de pie en la entrada del hospital general de Seúl.

Exacto. Recordaba que había corrido desde el parque hasta algún lugar que Yoon deseaba mostrarme, recordaba que el se había acercado a mi para besarme, pero después de ello solo sentí un peculiar sentimiento de soledad acompañado de sonidos producidos por las ambulancias que entre mezclado con el sonido de la lluvia, hacian  la experiencia aun más desconcertante.

Al abrir los ojos no encontré a Yoon, no mire a nadie cerca más que a las personas con batas blancas que se cubrían de la lluvia con una sombrilla mientras caminaban en dirección  a la cafetería de la calle adyacente. Para que finalmente al darme la vuelta me encontrara con aquel gran edificio que era nadamas y nada menos que el hospital.

Desde ese entonces no he visto a Yoon. Pero eso es lo que pretendo hacer después de ver a mi jefe para asi de manera formal dejar la compañia.

-¿Señor Lee?- pregunte cuando lo vi pasar frente a mi- ¡Señor Lee!- grite para que este detuviera su paso-Señor Lee- hice una reverencia- Necesito hablar con usted-

La verdad es que no me sentia con la suficiente confianza como para plantarme frente a él pero tenía que perder el miedo, no siempre iba a  quedarme detrás de la bandeja de entrada de su ocupado mail, mucho menos tendría que demostrar miedo después de que Jumi hizo lo que hizo, de hecho tendría que mostrarme aún más valiente, segura y con más confianza de la que tengo. Ser más fuerte. Más Yoongi.

-¿Tu eres?- me examino de arriba a abajo- No estamos contratando a alguien así que deberías de…-

¿De verdad? Es una verdadera tontería que tu jefe no te reconozca después de que hayas trabajado para él desde hace unos 5 años. Es una broma de muy mal gusto, pero para una persona como él no le es relevante el hecho de conocer a sus empleados, y más si no eres alguien que le genere tanto dinero como Jumi.  Después de todo en esta  empresa soy prácticamente un 0 a la izquierda así que… ¿Que podría esperar?

Además, ya no importa. Me iré.

-Minju- comente- Choi Minju, la compositora de Jumi- afirmé. El continuo mirándome con extrañeza. Bufe- ¿La chica que no quiso cantar en el set de grabación?-

Lee toco su barbilla esperando respuesta,me miró con más detenimiento y despues de un par de segundos trono sus dedos y asintio. Acto que me hizo saber que me recordaba. Al menos por el momento.

-Señorita Choi- sonrio- Es bueno verla porque justo estamos planeando el próximo lanzamiento de Jumi, ya sabe el nuevo mixtape sale en un par de días pero ya tenemos que trabajar en el siguiente y esta vez no será nada sencillo- comenzó a caminar- ¿Qué opina de las canciones de amor?-