El Hombre de la Oscuridad ღ HeeJake/Jayke/HeeHoon ღ FanFic

ღ Cap.61

Pasado un largo rato lleguemos a una explanada, el carruaje se paró.

-Jay: Bien seguiremos a pie, para que no nos oiga llegar.

-Heeseung: Buena idea.

-Jay: En marcha pues. ¿Llevas alguna arma?

-Heeseung: Solo tengo mi daga.

Saqué mi daga de la bota, la verdad es que era bastante pequeña, era buena para degollar a mis victimas, pero para matar a ese demonio creo que no seria nada útil.

-Jay: Con esa daga, solo le harás cosquillas y yo ahora que lo pienso no llevo ninguna arma. Será mejor que vayamos a mi palacio, allí tengo una habitación con bastantes armas donde elegir.

-Heeseung: Pues vamos.

Jay comenzó a correr y yo lo seguía, ya que por allí no sabia por donde ir.

Pasados unos minutos lleguemos a su palacio, entremos rápidamente y nos dirigimos al sótano, Jay se sacó una llave del bolsillo y abrió la puerta del sótano, entremos y nos dirigimos a una sala, al entrar vi que la sala estaba llena de espadas, pistolas, escudos, arcos y mas armas. Él se acercó donde había un montón de espadas y cogió dos.

-Jay: ¿Sabes usarlas?

-Heeseung: Claro que si.

Me lanzó una espada con la empuñadura de color de oro y la hoja plateada, la verdad es que al cogerla noté que era bastante ligera. Y Jay cogió otra espada para él, la suya tenia la empuñadura color de bronce y la hoja plateada.

-Jay: Bueno pues ya podemos irnos a matar a ese mal nacido.

-Heeseung: En marcha.

Ambos salimos del sótano Jay cerró la puerta y se guardó la llave en el bolsillo del chaquetón. Salimos del palacio y caminemos por el bosque, pasado un rato lleguemos a la iglesia en ruinas, Jay se paró en seco y me miró.

-Jay: Bien ya hemos llegado, vamos a hacer una cosa. Yo entro antes y le digo a ese imbécil que no estabas en tu palacio, entonces supongo que se enfadará. Pues tu aprovecharás ese momento para aparecer rápidamente y clavarle la espada por la espalda, yo intentaré que este girado de espaldas al pasillo, así no te verá llegar.

-Heeseung: Esta bien.

-Jay: Pero tienes que ser muy rápido.

-Heeseung: Tranquilo que lo seré.

-Jay: Bueno pues voy.

-Heeseung: Espera. ¿Vas a ir con la espada?

-Jay: Joder es verdad, toma llevala tu y cuando llegues y le hayas clavado la espada me pasas la mía y yo le cortare la cabeza a ese capullo.

-Heeseung: Esta bien.

Jay se fue caminando con cuidado de no hacer ruido, vi como entraba dentro de la iglesia. Me dijo que esperara diez minutos, así que me quedé allí esperando.

Narra Jake.

Me encontraba a punto de dormirme y el extraño hombre estaba dando paseos por el pasillo, se le notaba bastante impaciente y eso que apenas habían pasado unas cuantas horas desde que Jay se fue. Mis ojos se cerraban, pero entonces oí la sexy voz de Jay.

-Jay: Hola, ya he vuelto.

El extraño hombre se acercó a Jay y lo miró.

-Voz: ¿Y el cadáver de Heeseung?.

-Jay: He ido a su palacio, pero allí no estaba. Le pregunté al sirviente que me abrió la puerta y este me dijo que su señor se había ido a pasar la noche fuera.

-Voz: ¡Mierda!.

-Jay: Tranquilo, se habrá ido con algún chico, ya mañana vuelvo otra vez.

-Voz: ¡No! Ese malnacido tiene que morir esta noche.

-Jay: Pero que impaciente.

-Voz: Y tu entra en la celda.

Jay caminó hacia la celda, entonces vi a Heeseung por el pasillo, miré a Jay y él me sonrió.

-Voz: ¡Vamos entra!

El hombre abrió la puerta de la celda, entonces Heeseung se acercó mas al hombre.

-Heeseung: Me temo que él no te va a hacer caso.- Dijo mientras le clavaba la espada por la espalda.

-Voz: ¡Maldito! Me has engañado.

-Jay: Efectivamente.

El extraño hombre comenzó a reír, su risa era maligna a mi me estaba comenzando a dar miedo, se giró hacia Heeseung y lo empujó y este cayó a unos metros. El demonio seguía riéndose sin parar, se acercó a Jay lo agarró por el pelo y lo tiró hacia donde estaba Heeseung.

-Voz: ¡Imbéciles! ¿Os pensabais que con una simple espada ibais a acabar conmigo? Ay pobres insensatos. Apenas me ha echo cosquillas.

El hombre se acercó hacia donde estaban Heeseung y Jay, vi como cogía a Jay por el pelo y lo arrastraba por el pasillo, lo tiró dentro de la celda y cerró la puerta. Me acerqué a Jay.

-Jake: Señor ¿Esta bien?.

-Jay: Si, no te preocupes. Lo siento Jake, no ha salido como esperábamos, ese tío es demasiado fuerte.

Me acerqué a los barrotes y miré hacia donde estaba Heeseung.

-Jake: ¡Señor Heeseung cuidado!.

Heeseung se giró y me sonrió.

-Heeseung: ¡No te preocupes, Jake! Este cabrón no va a poder conmigo.

-Voz: Eso ya lo veremos.

-Heeseung: Si tienes valor, sal conmigo a fuera y pelemos a muerte.

-Voz: Por mi vale.

-Heeseung: Vamos.

-Jake: ¡No señor Heeseung, no vaya!.

-Heeseung: ¡Tranquilo Jake. Nos volveremos a ver!.

-Voz: No estés tan seguro, por que pienso acabar contigo.

Ambos desaparecieron en la oscuridad del pasillo.