Lucía.
Dentro de unas pocas horas tenemos un show en Buenos Aires, luego de varios meses.
Apenas ayer volvimos de España, el cuerpo ya no es el de antes, sino hubiéramos vuelto hoy mismo a nuestro querido país, pero ya nos resulta prácticamente imposible bajar del avión e ir a cantar.
Estas últimas semanas no han sido para nada fáciles de llevar, hemos discutido como nunca con Joaquín.
En medio de la gira empezamos a tener muchos problemas, más que nada estrés por los conciertos, pero a esto se sumaron otras cosas, como mi relación -de amistad por supuesto- con Benjamin Vicuña.
Fueron días realmente imposibles de convivir, era mal humor todo el tiempo, y se nos hizo bastante dificil poder disimularlo tanto en los shows como en las entrevistas.
Los celos que -por parte de Joaquín- se manifestaban en cada previa antes de salir al aire eran insoportables, aunque lo entiendo, tenía razones para sentirse así, pero ya hablaré luego de eso, ahora lo que importa es hoy.
Por suerte ya estamos mucho mejor con mi hermano, y esperamos poder dar un show un increíble como el que nuestro público merece.
Eran las 11 de la mañana y ya tenía a Joaquín llamándome.
—Lucía, ya estás lista? Acordate que tenemos que terminar de elegir la ropa para hoy, decime que saco te pones asi llevo uno similar —Dijo apenas atendí.
—No dormimos juntos, aprende a saludar.
—Perdón, buenos días enojona, estoy muy estresado linda
—Buen día Joaquín, yo igual. Pero voy a usar los dos sacos que te mandé ayer. El primero sería el negro estilo 80s y el segundo más disco, de muchos colores, y la parte de abajo queda igual
—Genial Gachi.
—¿Algo más? —Respondí algo cortante.
—¿Seguis enojada?
—Ya va pasar, Joaquin —Sí, dije que todo estaba mejor pero no bien cien por ciento, ayer Joaquín prometió pasar la noche conmigo, pero estuvo armando la lista de canciones para el show de hoy y se le olvidó venir a verme.
—¿Seguis en la cama?
—¿Qué es esto, un interrogatorio? Sí, sigo en la cama nene —Respondí perdiendo la paciencia.
—Dale anda al living y fíjate lo que tenes en la mesa, decime si te gusta antes de que me cuelgues.
Me levanté y caminé hasta la dichosa mesa, habían unas pequeñas flores blancas, para mí tienen un significado especial, indican como buena suerte, un momento alegre o lindo y eso Joaquin lo sabe.
—Ay —Dije —Están hermosas Joaquín. ¿Cuando viniste a dejarlas?
Me colgó antes de responder y ya estaba volviendo a enojarme cuando siento sus manos por detrás sobre mi cintura.
Pegué un salto y estaba por hablar pero él se me adelantó. —Shh —Me calló con un corto beso. —Llevalas al show, sé lo mucho que te encantan linda, y después de estos días te va hacer bien sentir tranquilidad, de paso te olvidas que ayer no pude venir
—Te perdono —Dije dandole un pico —Solo porque me pareció un gesto muy lindo y me sorprendiste, no recordaba que tenias la llave del departamento
—Sos mi mujer —Me agarró aun más la cintura. —Obvio que tengo tu llave.
Sonreí y luego hablé—Me voy a bañar ¿me haces algo de desayunar?
ESTÁS LEYENDO
Pimpinela One Shots
De TodoHistorias cortas de Pimpinela, inspiradas en sus entrevistas, shows y demás. Todas las historias serán de un capitulo, aunque tal vez haya alguna excepción.