Santo Domingo

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Lucía.

Acabábamos de llegar a República Dominicana. Uno de los países que tanto queremos..  Justamente por los recuerdos que tenemos aquí.

Flashback.

Estábamos por presentar nuestra última gira; Amores, Pasiones.

—Joaquín, esta suite es maravillosa. —Dije apenas entramos.

—Y vos querías que la cambiemos para dormir en separadas.

—Las sospechas.. La gente. Es demasiado.

—Nunca es demasiado cuando se trata de estar con vos.

Atacó mis labios ferozmente. Un beso lleno de desesperación, y de ganas de más.

—Tranquilo..Acabamos de llegar.

—Nunca se puede estar tranquilo cuando tu mujer es Lucía Galán. —Habló sobre mis labios y esta vez fui yo quién atacó su boca.

Me hacía sentir la mujer más poderosa y hermosa de este mundo. No hace mucho tuve a Rocío y mi cuerpo había sufrido muchísimos cambios, y uno de mis mayores temores era dejarle de gustar a este hombre. Pero con sólo una mirada me devolvía toda la seguridad que necesitaba.

Me subí a horcajadas sobre él sin separarme de su boca. Con mucha desesperación le saqué la camisa, y él tiró mi remera por ahí.

—Debes ser la madre más hermosa del mundo. Que maravillosa mujer —Se mordió el labio y con besos bajó por mi cuello.

Y a estas cosas me refería cuando decía que me devolvía la seguridad y que me hacía sentir la más bonita de todas.

Nos acostamos en la cama, terminamos de sacarnos toda la ropa y sin previo aviso comenzó con las estocadas. Eran rápidas y totalmente placenteras.

La habitación estaba completamente inundada de nuestros jadeos y mis ruidosos gemidos.

Tuvimos varios rounds, hasta que finalmente decidimos descansar para el día siguiente que nos esperaban muchas notas de radio y de televisión.

Fin del flashback.

Nuestra llegada al hotel no fue muy diferente a aquella de hace años atrás. Es decir, hicimos lo que hacemos la mayoría de las veces que llegamos a una suite; estrenar la cama, y ver si el colchón está bueno.

Por supuesto, esta no fue la excepción y aquel colchón era maravilloso, tanto el de la cama de mi hermano, como el de la mía. Joaquín y yo disfrutamos como nunca el uno del otro.

Ya estabamos llegando al final de la primera parte de nuestro nuevo tour.

El primer día fue maravilloso, lo terrible llegó a la noche.

—No sabes quién me mandó saludos. —Entra Joaquín a mi parte de la habitación, más sonriente de lo que me gustaría.

¿Quién? —Pregunté intrigada.

—Adivina..  —Dijo para molestarme y yo rodé los ojos.

—Dale, Joaquín, decilo de una. Sabés que no me gustan estos juegos.

—Tu mejor amiga.

—Eh? Manuela Bravo? Patricia? —Negó. —Eugenia? —Volvió a negar.

—No tengo otra mejor amiga. Podes hablar.

—Fue irónico mi vida..

—Jodeme que la pelotuda de Daniela? —Se quedó callado y entonces supe que sí era ella. —Yo la mato. Te juro que me tomo un avión a Perú y la mato.

Pimpinela One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora