Lucía.
Había estado mal durante el día, aunque la labor en el centro de jubilados había sido espectacular y relajante, estuve estresada, así que decidí desahogarme con Alberto, creo que fue un error y que no corresponde, pero fue la primer persona que vi y no tenía opción.
Me consoló y me dio un abrazo. Para mi mala suerte justo venia entrando Joaquín, estábamos en el hall del hotel.
Garraspeó con la garganta y habló. -Buenas.. permiso
-Joa -Me di vuelta y él solo me miró y siguió caminando.
-Dejalo, Lu -Habla Alberto. -Necesita tiempo tal vez
-No.. déjame manejarlo a mi, Alberto
Me separé del tipo y seguí a Joaquín, estaba yéndose al bar del hotel.
Cuando entré lo vi sentado en la barra y disimulando una sonrisa para evitar levantar sospechas, me acerqué.
-Joaquín -Dije casi en un susurro. -¿Podemos hablar? -No tenía respuesta de su parte asi que volví a hablar. -Por favor
-¿De qué? Vos y yo no tenemos nada de que hablar, Lucía de verdad
-Joa lo que viste allá no..
Me interrumpió -Es que no me interesa, no quiero hablar de nada Graciela, si lo amas a él perfecto, te dejo tranquila
Me senté junto a él para intentar tener una conversación más "privada".
-Por favor, Joaquín solo le comenté que estaba muy angustiada y que no había sido un día tan bueno, me consoló como los amigos que somos
-Mirá vos
-Te estoy diciendo en serio, además vos si podes estar casado, compartir con Viviana pero si yo lo hago estoy mal, no es así tampoco
-Con la diferencia de que yo nunca me divorcié en la vida -Habló con rencor. -No tuviste que haber vuelto con ese tipo que te trae ganas
-Sabes perfectamente que no es asi y que no me interesa en lo absoluto, vos sos él que me importa, y ya te dije que volvimos por aparentar, hay que guardar las apariencias Dios entendeme
-Entonces no tires tu "esfuerzo" -Hizo comillas con los dedos. -a la basura y dejá de montar teatros, Graciela, no vaya ser que se rompan las apariencias y todos se estén dado cuenta de como estás
-No seas sarcástico, de verdad la estoy pasando mal -Inmediatamente me bajé los lentes que tenía en la cabeza para ocultar lo cristalizados que estaban mis ojos. -Te amo a vos, por favor entendeme
-De la boca para afuera decimos muchas cosas, pero se demuestra con hechos como me has dicho toda la vida, Lucía.
-Siempre te demuestro lo mucho que te amo, tengo errores, sí, como vos y como todos, pero eso no quita que te ame
-Entonces tal vez no me amas lo suficiente
-Su martini señor -Dice el bartender dejando la copa de Joaquín sobre la barra. Joa solo asiente con la cabeza y el muchacho se retira.
-No vuelvas a repetir eso, Joaquín, es hiriente -Estaba muy angustiada.
-Sí eso te parece hiriente imagínate como me sentí yo cuando vi que lo llamaste para abrazarlo y cuando le dedicaste un saludo especial por el día del padre, a él, en vez de a mí. Por él te desvivís Lucía, por mi no y eso me duele
-Tenes razón y me disculpo por eso pero ya conoces mi respuesta..
-Me chupan un huevo las apariencias María Graciela -Alzó un poquito la voz. -Innecesario por Dios, no había necesidad de estar ahí pegada y menos de dicarle unas palabras a él -Habló con total desprecio e indignación. -Y no a mi.
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Pimpinela One Shots
AlteleHistorias cortas de Pimpinela, inspiradas en sus entrevistas, shows y demás. Todas las historias serán de un capitulo, aunque tal vez haya alguna excepción.