Domingo
14 de noviembre
En cuanto me vestí, cogí la bolsa de tela en la que ponía <<Be positive>>, me la colgué en el hombro y bajé a la calle. Quería ir de compras por las tiendas de las calles de la ciudad, para despejarme del caso de Brandon.
Notaba que mi mente tenía tantas cosas en la cabeza que me iba a estallar.
La desaparición de Brandon me había afectado, y mucho, era a la única persona que tenía en esta ciudad, y a la que amaba con todas mis fuerzas. Todavía tenía la esperanza de que apareciera.
En cambio, aunque no quisiera admitirlo, el hermano de Brandon, me hacía sonreír cuando estaba con él. Daba igual. Aparte, no quería que me pasara igual que mi madre, y por eso se me quitaban las ganas de tener una relación. También era por no faltar al respeto a mi mejor amigo. Ya que a mí no me gustaría que si desapareciese, él tuviera una novia, yo tampoco lo hago.
Caminé durante horas por las calles de la ciudad y entré a varias tiendas. La bolsa de tela empezaba a pesar así que decidí sentarme en un banco que se situaba frente de la tienda Emporio Armani. Me quedé observando la tienda y vi salir a alguien... Ese alguien tenía un parecido a Brandon. Lo observé más. Claro que tenía un parecido, era su hermano, Oliver.
Él me vio. Yo le ví.
—Hola de nuevo, Andrea —dijo con una pequeña curvatura en sus labios.
Tenía dos bolsas en las manos, una de esa tienda y otra de una marca más barata.
—Buenos días. Parece que hoy no trabajas.
—Sí, los fines de semana libro y he decidido ir a comprar ropa nueva.
—¿Tan bien pagan a los policías? —pregunté mirando las bolsas.
Él se rio pero esquivó la pregunta. Miró su reloj. Las agujas marcaban que eran las 14:16h del mediodía. Mi barriga empezó a sonar y él lo notó.
—¿Me permites que te invite a comer? —soltó como si nada.
—¿Así de repente?
—Tengo que hablar contigo sobre algo. Y no veo adecuado hablar de ese tema aquí, en plena calle.
—Oliver, no estoy para tonterías.
—Brandon no es una tontería, Andrea.
—De acuerdo —suspiré—. Iré a comer contigo. Pero nuevamente no hace falta que me pagues mi comida.
Me miró unos segundos y en su garganta vi que tragó saliva, lo que me hizo ver que quería tratar un tema importante.
***
Entramos al restaurante y enseguida nos dieron mesa para dos personas. Oliver me apartó la silla y me hizo un gesto para que me sentara, y a continuación, me acomodó la silla cerca de la mesa.
Yo pedí un DougieDog, un plato caro, me lo aconsejó Oliver ya que él también se lo iba a pedir. Estuvimos hablando de mientras esperábamos nuestra comanda. Oliver puso una cara seria y empezó a hablar.
—Andrea, me dijo Brandon que estabas pasando por un mal momento económico.
—¿Y por qué te lo dijo a ti? Era mi vida y lo sigue siendo.
—Le preocupabas. Y bueno... —intentó decir algo pero lo ocultó. Así que prosiguió— Yo era la única persona a la que le podía contar las cosas aparte de ti. No tenía a nadie más.
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Secretos Ocultos
Mystery / ThrillerAndrea es una joven estudiante apasionada por los misterios, pero cuando su mejor amigo desaparece, se adentra en un mundo oscuro y peligroso donde nada es lo que parece. En medio de la investigación, conoce a un hombre misterioso por el que no pue...