-вяσкєη. {carlos marco у tu}

Capítulo 26, parte I: ______'s Point of View.

"I wait for you, fondness." - "Te espero, cariño."

Fruncí el ceño dando una pequeña examinada a la chica parada en la puerta. Sus ojos estaban rojos e hinchados. "Disculpa, ¿e...está Carlos?."

Hice una mueca y me mordí el labio. "¿Quién eres?."

Apretó sus labios. "¿Quién...?." Carlos se congeló en la puerta viéndo a la pequeña la cuál lloraba sileciosamente.

"Carlos," murmuró y luego se le tiró a los brazos. Fruncí el ceño a más no poder. Carlos estuvo unos segundos rígido pero después la apretó con fuerza. "Carlos." Volvió a repetir mientras lloraba.

¿Qué mierda sucedía?.

"Princesa." Besó la coronilla de su cabeza. De un momento a otro sentí celos horribles por ella. Salí hacia el patio dandoles más 'privacidad', di un fuerte portazo y suspiré. Me senté en el suelo, oí los sollozos de la chica calmarse y luego el silencio. Toqué la cadena y me dieron ganas de romperla en mil pedazos. Bufé y negué con la cabeza, ¿porqué ser tan inmadura?.

"¿Cielo?." Ignoré su llamada y tiré del cesped que yacía bajo de mí. "_______." Eché todo el cesped que desgarré y volví a tirar de él.

"Carlos quiere hablar contigo, ______," La voz de la chica entró por mis oídos, "es de muy mala educación dar la espalda cuando te hablan."

Tensé la mandíbula y me levanté de golpe. "¿Sabes qué es de mala educación?. Llegar y entrar a una casa que no es tuya."

"Basta, las dos." Carlos murmuró poniendo su mano en mi brazo.

Retiré mi brazo rápidamente y le fulminé con la mirada. "¿Qué quieres?."

"¿Sabes al menos quién soy?." Murmuró la chica mirando al suelo, se escuchó su sollozo y Carlos tensó la mandíbula mirándo hacia el cielo.

Mis defensas fueron bajando de a poco y mi ceño se normalizó. "¿Debería?."

Levantó la mirada y me sonrió tristemente. "Carla Marco, la hermana de Carlos." Estiró su mano delante de mi. Sentí mis mejillas arder y cerré los ojos fuertemente, estreché su mano muriéndome de verguenza.

"Demonios." Murmuré, Carla sollozó y la abracé. "Lo siento, de verdad." Apretó mi cintura y lloró fuertemente. "Calma, calma." Di caricias en su espalda y dirigí mi mirada hacia Carlos. Me sorprendí al ver una lágrima solitaria recorrer su rostro. Levanté mi mano y se la sequé delicadamente, el tomó mi mano y depositó un beso en ella.

Ella se separó de mí y me sonrió, sus ojos se cerraron y se fue hacia atrás, Carlos la agarró frunciendo el ceño. "Princesa," golpeó su rostro suavemente, "Carla." Ella no abrió los ojos, Carlos la tomó en sus brazos y corrí a abrirle la puerta. Cuando estuvo dentro, corrí hacia la cocina y mojé un paño, lo llevé al sillón y Carlos se lo puso en la cabeza.