Capítulo 10.

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Alicia.

Al salir de la casa, empiezo a sentirme observada y un poco nerviosa. Empiezo a mirar hacia todos los lados, pero no veo nada raro, solo un hombre, supongo que un trabajador, hablando por teléfono. Mientras habla, mira para todos los lados y finalmente, su mirada se detiene en la mía. Se queda callado, pero nuevamente empieza a hablar después de unos dos segundos, sin quitarme la mirada.

Decido ignorarlo, y mejor mirar por donde camino. Nos alejamos varios metros de la casa hasta llegar a un pequeño parqueadero, donde solo hay varias camionetas de color negro con vidrios oscuros. Nos subimos en una de ellas. Aleksander al volante, Carlo de copiloto y yo en la parte de atrás. El auto se pone en marcha, y yo me concentro en mirar por la ventana.

¿Y si Jeff me hace lo mismo de cuando lo hice enojar?

No... no lo haría enojar... y si lo intentara, ellos no dejarían que me haga nada malo... no lo dejarían.

¿Y si me dejan sola con él?

No... no lo harían.

¿Qué haré si me habla? Me da miedo. No quiero hablar con él.

intentaré ignorarlo... sin ser grosera.

Durante el camino, pienso en muchas cosas, no solo en qué podría pasar en casa de Jeff, sino también en Max, en mis padres, en mi antigua casa, en mi futuro.

Pienso tanto, que mi mente vuelve al mundo, al hacerse consciente de que Aleksander acaba de abrirme la puerta, esperando que me baje.

Una vez lo hago, en mi vista aparece la gran casa, trayéndome los malos recuerdos del día de mi cumpleaños, la mala experiencia y posiblemente el saber que, ese, fue el cumpleaños que ha tenido más acción en toda mi vida. Pues desde que tengo recuerdos, mi cumpleaños siempre fue un día como otro, a excepción de las veces que me escapé para ver a Max, y él me daba un regalo y un pastel para comer juntos. Sonrío con el bonito recuerdo.

Entre más cerca estamos de la casa, mis inseguridades aumentan, miedo a no caerle bien al tal Nikolai, y miedo a que Jeff me hiciera algo.

Carlo parece darse cuenta de esto y me agarra la mano apretándola un poco, me tenso por un segundo, pero me relajo y dejo nuestras manos juntas.

Entramos a la elegante casa. En la sala está sentado Jeff hablando con un hombre rubio, vestido con un traje elegante azul oscuro. Sus ojos, son azules muy lindos. También hay una chica, que parece un poco mayor que yo, con cabello negro y ojos cafés. Cuando entramos la mirada del rubio se dirige hacia mí. Nos quedamos mirando unos segundos y después él sonríe y se levanta acercándose a mí, es muy alto, pero ninguno alcanza la gran altura de Aleksander.

Suelto la mano de Carlo para poder retroceder un paso ante la mirada seria.

- ¡Hola! - dice entusiasmado sin quitarme la mirada de encima.

-H-hola- susurro mirándolo también, su mirada curiosa me dice que es divertido y le gusta causar problemas.

-Soy Nikolai, mejor amigo de estos tres, rad vstreche- dice ofreciéndome la mano.

- ¿Qué ha dicho? - le susurro a Aleksander confundida.

-Que está encantado de conocerte- me responde sonriendo.

-Soy Alicia, encantada de conocerlo también- digo sonriendo. Le doy la mano y nos damos un apretón.

-Espero que nos llevemos bien - dice soltándome y poniéndose serio.

Luego, Nikolai se sienta al lado de la chica y le dice algo, la chica le sonríe, para luego levantarse y acercarse a nosotros.

-Hola tíos- saluda a Aleksander y a Carlo, dándoles un beso en la mejilla a cada uno. La miro con el ceño fruncido.

Soy feliz, si estoy con ustedes (en proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora