Lisa no estaba segura cuánto tiempo habían estado abrazadas pero si sabía que los temblores casi habían desaparecido del cuerpo de la doctora y su corazón había recuperado su ritmo habitual. Pese a estar aliviada de haber logrado ayudar a Roseanne, comenzó a sentirse avergonzada por la osadía que tuvo hace un rato al abrazarla semi desnuda. Especialmente porque no podía dejar de pensar en lo increíble que se sentía su cuerpo junto al de ella.
—¿T-te sientes mejor?—preguntó sin atreverse a moverse.
—Estoy mejor—dijo ella y Lisa no supo interpretar el tono de su voz—Gracias por ayudarme—
Lisa se arriesgó a alejarse lo suficiente para poder mirar su rostro. Tal vez para cualquier otra persona, Roseanne se vería igual de impasible que siempre. Pero Lisa se había acostumbrado tanto a aquel rostro que podía percibir el más sutil cambio. Como la calidez que emanaba de sus ojos mientras se miraban.
—Estaba asustada—dijo Lisa en un susurro ante de ser consciente de las palabras saliendo de sus labios.
—¿Lo estabas?—preguntó Roseanne arrugando levemente el entrecejo—¿Por qué?—
—El accidente...—
—El niño está estable y fuera de peligro. Y estoy segura que el bombero debe estar bien asique no hay...—
—Estaba asustada por ti—la interrumpió Lisa negando con la cabeza—Vi en las noticias cuando entraste al autobús... y luego lo vi caer. Y no salías. Por más que miraba, no lo hacías—Lisa agachó la cabeza y cerró los ojos al recordar esos eternos minutos. La angustia que sintió al pensar que tal vez eso sería todo. Que no volvería a ver a Roseanne nunca más.
—Hey...—dijo Roseanne sujetando sus mejillas con sus manos y levantó su barbilla—Estoy bien. Estoy aquí—
—Lo sé—suspiró—Sólo estoy siendo emocional, no me hagas caso—
—Me gusta—dijo Roseanne y Lisa la miró confundida. Roseanne sonrió y Lisa juró que era la sonrisa más hermosa que había visto en su vida—Que te preocupes por mí. Me gusta—
Lisa se mordió el labio sin saber qué hacer o decir. Pero ese pequeño movimiento llamó la atención de Roseanne quien no dejó de mirar su labio entre sus dientes. Con sus dedos, aún algo fríos, Roseanne lo acarició y Lisa estaba segura que su corazón se saldría del pecho.
—Creí que estabas molesta conmigo—susurró la doctora. Lisa tragó duro y continuó mirándola.
—¿Por qué?—preguntó.
—Me evitaste toda la tarde. Y estuviste con Dave...—continuó susurrando—Por un momento pensé que tal vez él...—
—No. Él está casado—Lisa se apresuró a decir—Y no es mi tipo—
—¿Y cuál es tu tipo?—le preguntó Roseanne. De alguna manera se habían acercado demasiado y la respiración de ambas se mezclaba.
—Ya no estoy segura—susurró Lisa rozando los labios de la doctora en el proceso. Lisa nunca se había sentido tan emocionada y nerviosa al mismo tiempo. Si se tratara de otra persona, ella habría tomado la iniciativa y la habría besado. Pero frente a ella estaba Roseanne. La única mujer que era capaz de reducirla a un manojo de nervios y ansiedad como si fuera una adolescente.
—¡Roseanne!—escucharon que alguien gritaba antes de abrir la puerta y hacerlas saltar. Lisa abrió los ojos al ver al hermano de Roseanne mirar confundido la escena frente a él—¿Roseanne?—
Lisa recordó en ese momento que ambas estaban sólo en ropa interior bajo las mantas pero aún así se sentía muy expuesta y soltó a Roseanne para rodear su cuerpo con una de ellas. Roseanne dio un largo suspiro antes de tomar una de las mantas y alejarse completamente de Lisa.
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Until death do us apart (Chaelisa)
Fanfiction¿Qué pasaría si se abrazaran el amor y la muerte? ¿Moriría el amor? ¿O se enamoraría la muerte? Por cientos de años Roseanne ha vivido una vida monótona cumpliendo su deber tomando las almas de los humanos, aquellos seres a los que Roseanne no comp...