Until death do us apart (Chaelisa)

XXXII

Miedo. 

Roseanne no recordaba haber sentido miedo alguna vez. Probablemente lo sintió cuando escuchó la voz de su Padre informándole que sería expulsada. Tal vez lo sintió cuando Miguel se preparaba para despojarla de sus alas. 

Pero nunca se había sentido tan aterrada como en ese momento. El tiempo parecía haberse detenido. O tal vez ella se había detenido mientras observaba la caos reinar a su alrededor. 

Ruido, gritos, personas corriendo, llorando y fuego. Mucho fuego. 

—¿Dónde está?—preguntó Roseanne mirando a mi alrededor. Nadie se detenía cuando pasaba a su lado porque nadie podía verla. No estaba en su forma humana y era mejor de esa manera porque no estaba en condiciones de tratar con nadie en ese momento—¡¿Dónde está, Jimin?!— 

—No lo sé—dijo el chico a su lado buscando ansiosamente a su alrededor. 

En cuanto le informó a Roseanne de la situación, esta de inmediato comenzó a buscar a Lisa con desesperación. Lo primero que hizo fue buscarla en casa pero no se encontraba ahí. Por supuesto que su segundo destino fue el hospital y fue ahí donde se enteró que Lisa y otro grupo de doctores y enfermeros fueron a asistir en un gran incendio en una fábrica. 

—No debería estar adentro ¿verdad?—preguntó Jimin siguiendo a Roseanne rápidamente. Ambos estaban rodeando la fábrica intentando encontrar a Lisa. Habían muchos heridos así como bomberos, oficiales de policía y apoyo médico. Pero ninguno era Lisa—La asistencia médica no debe entrar ¿verdad?—

Roseanne miró la fábrica en llamas. Esta estaba siendo completamente consumida por las llamas y Roseanne sentía muchas almas dentro esperando por ella. Se sentía entumecida y no sabía qué hacer ¿Lisa estaba dentro?

—Busca su alma... Si Lisa está... si ella está...— 

—¡No!—dijo Roseanne—Ella no está muerta, Jimin— 

—Pero...— 

Su respuesta fue interrumpida por un grupo de bomberos que salían de la fábrica con varios heridos. Ninguno de ellos era Lisa y la desesperación de Roseanne siguió aumentando. 

—¿Dónde está el resto?—preguntó un hombre que parecía ser el capitán de bomberos a uno de sus hombres que acababa de salir. 

—Los perdimos mientras salíamos... Hay mucho fuego, jefe. Apenas se puede ver. Es un infierno—dijo el bombero. 

—¿Y el equipo médico?— 

—Siguen adentro—

Equipo médico. Siguen adentro. 

Esas palabras se repitieron en el cerebro de Roseanne y sin pensarlo entró al edificio. Aún en su forma no humana, el calor y el humo hacían difícil la búsqueda. Mientras corría con desesperación buscando a Lisa vio algunos cuerpos calcinados. Sus almas reclamaban su atención pero aún así no se detuvo. No podía. No iba a detenerse hasta encontrar a Lisa. 

Las condiciones dentro de la fábrica empeoraban rápidamente. El techo colapsaba y era cosa de tiempo para que todo el sitio se viniera abajo. 

—¡Maldición!—gritó Roseanne con frustración ¿Dónde carajo estaba Lisa? 

—¡Roseanne, aquí!—escuchó a Jimin gritar. Corrió siguiendo la voz de Jimin y cuando llegó a su lado observó a Lisa inconsciente bajo algunos escombros. 

—¡Lisa!—Roseanne intentó quitar los escombros pero era inútil. En su forma no humana no podía tocar nada asique rápidamente cambió a su forma humana. El calor y el humo rápidamente hicieron estragos en su cuerpo, sus ojos comenzaron a lagrimear y respirar era imposible.