esenas

4 0 0
                                    

Clair se veía realmente mal. Mucho peor que por la mañana. Sus ojos estaban opacos, su rostro pálido y demacrado. Me acerqué preocupado, tratando de despertarla sacudiendo sus hombros, pero no mostraba ninguna mejoría. Fue entonces cuando Kasuya, mi amigo cercano, se acercó a nosotros.

"Oye, Claire, ¿estás bien?" preguntó Kasuya con evidente preocupación en su voz.

Traté de despertarla con más fuerza, pero ella seguía inconsciente. En ese momento, Kirge, otro de nuestros amigos, se unió a nosotros y mencionó que Claire tenía fiebre.

"Como siempre, esa niña dragón siempre con fiebre", comentó Kirge con una mezcla de ironía y preocupación.

Kirge opinaba que Claire solo tenía fiebre, pero no estábamos tan seguros. Entonces, Sofia, una amiga que siempre estaba lista para ayudar, llegó con un paño húmedo y un poco de agua.

"Permítanme ver", dije con curiosidad y preocupación. "Según lo que sé, es muy extraño que una vampira se enferme".

Sofia hizo un gesto como si hubiera descubierto algo. "Lo tengo. Lo primero que debemos hacer es reducir su temperatura corporal. Quitemos su ropa y sequemos el sudor con una toalla húmeda".

Isi, otra amiga nuestra, sugirió: "¿Y si le damos un vaso de leche? A veces ayuda a bajar la fiebre".

Sin embargo, antes de que pudiéramos hacer algo, Kasuya nos interrumpió con una voz llena de preocupación: "Chicas, no creo que estemos haciendo lo correcto. ¡Esperen! ¿Qué están haciendo?"

Las chicas ya habían empezado a desvestir a Claire, pero en un desafortunado giro de los acontecimientos, el vaso de leche se derramó sobre ella, que aún permanecía inconsciente. Para empeorar las cosas, Kirge, en un intento desesperado por ayudar, le puso una salchicha en la boca, asegurando que si comía algo, se recuperaría.

Miré la escena con consternación. Claire yacía en la cama, sonrojada y respirando agitadamente, con un líquido blanco sobre ella y una salchicha en su boca. ¡Diablos! Aquello parecía la escena de un delito.

Así fue como nuestros intentos bien intencionados por ayudar a Claire se convirtieron en una situación desconcertante y embarazosa.

NotasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora