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Íbamos de camino a casa de Gustav mientras manejaba y de mi lado iba Amelia.

-Por favor lo de Tom que quede entre las dos ¿esta bien?- la joven se aplicaba bálsamo labial mientras que de reojo observaba a la mayor asentir con su cabeza.

-Esta bien, espero que el secreto pueda durar...- a mis palabras con sarcasmo solté una risa ya que Amelia era muy mala mintiendo.

Por fin conoceríamos a la esposa de Gustav, Linda, y además de su hija pequeña de solamente tres años.

Al llegar bajamos del auto dirigiéndonos a la puerta de la hermosa casa de Gustav, al tocar el timbre nos abrió su esposa, al vernos nos dio una cálida sonrisa al igual que un beso en nuestras mejilla y un abrazo.

-Un gusto Linda, me presento, mi nombre es Amelia, la media hermana de Gustav.-

-Un gusto Amelia, estás muy grande preciosa, tú debes ser Lhyan ¿verdad?-

-Exacto, un gusto Linda en por fin conocerte- ella me observo con mucha ternura en sus ojos mientras me daba una bella sonrisa.

-Son idénticas...-al comentario de Linda le devolvimos una sonrisa mientras agradecíamos, abrió mucho más la puerta dándonos el paso para adentrarnos.

Su casa realmente era bella, de pronto siento unos pequeños pasos provenientes del pasillo.

-¡Mi niña!- una pequeña y hermosa pequeña se acercó a nosotros, su cabello era largo y rubio con bastantes ondas, tenía los mismos ojos que Gustav, era preciosa.- ellas son tus tías mi amor, salúdalas.-

La pequeña Lhyan nos observó y fue a abrazar a Amelia, no pude evitar sentir las lágrimas lentamente apoderarse de mi, y en un momento se quedó un largo tiempo observándome.

-Lhy...¡tia Lhyan!- fue corriendo a mis brazos mientras escondía su pequeña cabeza en mi pecho, al abrazar a esta pequeña hermosura no pude evitar llora, acariciaba su cabello mientras estaba en el piso con ella por lo pequeña que era.

-Mi pequeña Lhy....- los sollozos de la mayor no tardaron en ser escuchados, todos observaban el momento con ternura.

-Gust...- la joven se aferró a los brazos del mayor mientras le mencionaba lo mucho que lo había extrañado.

-Estás muy grande mili...- al comentario de Gustav en mis labios se formó una sonrisa, volvimos a ver a Lhyan que estaba aún abrazando a esa pequeña criaturita.

-¡Parece que la pequeña Lhy tiene preferencias!- a las palabras de Amelia reímos todos mientras la pequeña me abrazaba más fuerte.

-¡Eres hermosa!- tomé a esta pequeña en mis brazos mientras que con mi dedo índice rozaba aquella nariz con un Perfecto perfil.- parece que los genes de los Shäfer siguen igual...- abracé a mi hermano mientras lo felicitaba a él y a su esposa.

Nos sentamos en el sofá mientras tomábamos café y conversábamos, fue un día demasiado bonito, la pequeña Lhy no se despegaba de mi.

-Tú...¡tú tocas la guitarra!- la pequeña hablo mientras observaba la guitarra colgada en una parte del lugar.

-Si mi amor, yo toco la guitarra y además canto- mi vista se dirigió donde estaba esa guitarra, la que yo siempre usaba y me gustaba tanto del estudio de los chicos.-sigue igual que el último día...-

-Siempre la traté de conservarla de la mejor manera...recuerdo muy bien cuando íbamos a practicar y lo primero que hacías era comenzar a componer tus canciones, eran realmente hermosas, me encantaba siempre escucharte tocar la guitarra- mire a Gustav y este jugaba con sus manos conteniéndose las lágrimas.

𝑨𝒔 𝑩𝒆𝒇𝒐𝒓𝒆...; Bill KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora