𝑨𝒔 𝑩𝒆𝒇𝒐𝒓𝒆...; Bill Kaulitz

-04-

Llegó el día del cumpleaños de Georg, Bill con Tom me pasarían a recoger, estaba terminando de arreglar mi cabello hasta que suena el timbre.

-Hola hermosa- Bill tomo de mi cintura acercándome a su cuerpo mientras mis brazos los entrelazaba por su cuello.- te ves preciosa...- este susurro en mi oído.

Tomé mi bolso y nos dirigimos al elevado, Tom nos estaba esperando afuera en el auto.

Estaba demasiado nerviosa, no sabía cómo iba a estar Gustav, ¿cómo reaccionaría al verme?, ¿me querrá ver?...mill preguntas pasaban por mi mente.

Jugueteaba con sus manos mientras respiraba un poco agitada.

-Mi amor...tranquila, todo estará bien.- hable mientras le tomaba de sus manos tratando de tranquilizar aquellas que se movían sin parar.

-Que pasa si no me quiere ver...quizás se enoje conmigo por desaparecer siete años completos...- mi voz se quebraba poco a poco pero no quería llorar ahora, sabía que al verlo lloraría mucho.

-Lhy, Gustav te ama demasiado, eres su hermana, ¿recuerdas la guitarra que te gustaba tanto en nuestro estudio?, bueno...el la tiene en su casa en conmemoración hacia ti, e incluso alguien muy especial para él tiene tu nombre...- a las últimas palabras de Tom me quede muy confundida.

-¿Quien?..- pregunté mientras mis ojos estaban abiertos par en par.

-El mismo té contará.- iba a hablar nuevamente pero llegamos a la casa de Georg.

Al llegar bajamos y tocamos la puerta.

-¿¡LHYAN!?-

-¿¡MÓNICA!?-

Hablamos las dos en sinfonía mientras de nuestros ojos comenzaron a caer lágrimas, en qué momento era posible que Georg estuviese con Mónica. Al abrazarla ella se aferró a mi mientras escuchaba sus sollozos y como me acariciaba mi cabello, mientras yo besaba su cabeza y copiaba su acción.

-Moni...Dios de verdad perdóname...- hable entrecortado mientras secaba mis lágrimas cuidadosamente.- perdóname por favor por no haberme comunicado contigo...perdóname por favor...- sollozaba mientras Mónica me daba mis manos.

-Lhy...no te disculpes por favor, ahora estamos juntas, de verdad que te extrañe tanto....- la castaña se aferró nuevamente a la rubia mientras estás dos sollozaban si parar.

Al estar un tiempo de esa manera nos logramos calmar, saludé a Georg de un gran abrazo mientras yo aun seguía llorando.

-Lhy...- este trataba de calmarme mientras acariciaba mi cabello como una niña pequeña.

-Perdón, es que ando sensible, me emociona tanto que Moni sea tu esposa...Dios mío...esposa...- hable mientras de mis labios salía una pequeña risa y de parte de Georg también.

Nos adentramos y nos dirigimos al sofá mientras hablábamos de todo, de la vida.

Y de pronto suena el timbre, ya sabíamos de quién se trataba, todos me miraron mientras en sus labios formaban una sonrisa.

-Lhy....¿quieres ir tú?- a las palabras de Georg accedí con mi cabeza mientras dejaba un suspiro y me levantaba de mi asiento.

Camino a la puerta sentía como mi corazón latía más rápido, mi respiración era más agitada, al llegar antes de abrir aquella respire profundo, serré mis ojos, y la abrí.

Apenas mire vi como Gustav estaba parado allí, al verme este abrió sus ojos par en par mientras se llevaba sus manos a la boca.

-Gust...hermano...por favor per...- no pude terminar mis palabras cuando siento como él se abalanza a mis brazos escondiendo su rostro en mi cuello y como salían pequeños sollozos de parte de él.