Capitulo 34

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La había llevado a un lugar alto, alejado de los transeúntes que pasaban par aquí y por allá, la chica lo siguió extrañada y curiosa pero aún así no dijo nada, lo vio como algo bueno, pues si bien ella no estaba del todo cómoda a su lado al menos si que se sentía segura junto a él y eso le resulta más gratificante de lo que el mismo esperaba. Esa confianza de saber que no le haría nada malo era algo que le recordaba a sus primeros días de genin cuando ella se permitía bajar la guardia en su presencia algo que no todo el mundo haría sabiendo que era un Uchiha.

Sasuke: desde aquí los fuegos artificiales se ven mejor.— dijo mirándola a los ojos.

El lugar estaba iluminado solo por la luz de la luna y los reflejos de la luz artificial que estaba un poco lejos de ellos. Ella miro alrededor, la luna estaba espléndida esa noche y le permitía ver muy bien todo.

Ambos miraron al cielo cuando el espectáculo de luz artificial comenzó. Sakura estaba mirándolo con emoción ¿Cuando fue la última vez que estubo en un festival? Y lo mejor de todo es que estaba en su aldea, después de tanto tiempo y dudas antes de su regreso.

Sasuke por su parte estaba más concentrado en su perfil y como las luces hacían diversos contraste con su cara y figura. Lo mejor de todo fue ver el espectáculo en los ojos de su acompañante. La emoción que reflejaba su mirada le aceleró el corazón y sintió sus mejillas y orejas enrojecer. Para su suerte ella estaba muy concentrada en el cielo como para darse cuenta.

Después de unos minutos que le parecieron muy cortos, aunque sabían que no era así. El espectáculo termino y ambos se miraron a los ojos. Ahora era la luna la que besaba sus facciones con su plateada luz.

Ella era hermosa, él siempre lo supo, siempre fue consiente de eso. No solo física sino como persona, era la mujer más linda que conocía a pesar de su carácter de mecha corta. Solía ser algo agresiva al contestar cuando estaba de mal humor, pero era capaz de llorar compasivamente por alguien que sufría aún si lo acababa de conocer, se tomaba a pecho las injusticias y no le importaba dar su vida por inocentes aún cuando era consiente de su falta de poder para salir victoriosa.

Ella por su parte lo veía también, los malos tratos los tenía presentes, pero también lo estaban esos pequeños detalles que para cualquiera no significaban nada, pero que ella era consciente de que cuando se trataba de él, decían más que palabras dulces o buenas y exageradas acciones.

Sasuke era mucho más guapo que la última vez que lo vio. Con gracia ese dato no la sorprendió, el era muy atractivo, con sus rasgos perfectos muy finos pero sin dejar de ser masculinos. Podía mirarlo a los ojos siempre y en ellos ver todo y nada al mismo tiempo; era como ser succionada por un agujero negro o ser lanzada a un pozo sin fondo.

Siempre serio pero no era malvado, de joven lo había visto darle un buen trato a los animales, lo había visto ayudar a un perro una vez y darle de comer a un gato callejero. Recuerda que eso le había parecido curioso, a pesar de que las personas le huían por ser de su clan, al menos los animales parecían curiosos y cómodos con su presencia. Una vez su padre le dijo que una persona que tratará bien a los animales no podían ser malos del todo y ella creyó en eso aún cuando con la gente era menos amable.

Ella siguió sumida en sus pensamientos y recordó la pregunta que Ino le hizo antes.

Recuerdo...

Ino: ¿que es lo que sientes por Sasuke?

Ambas se miraron y ella dudo en responder pero aún así lo hizo.

Sakura: la verdad ni yo misma lo sé. Tampoco lo quiero averiguar.

Ino: Sakura...— la interrumpió.

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