❛ 𝖮𝗎𝗋 𝖫𝖺𝗌𝗍 𝖣𝖺𝗒𝗌. ❜ ─ 𝐀𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐑𝐢𝐯𝐚𝐫𝐢
˹ Abril Garza es una omega que perdió a su alfa en un trágico accidente, con un lazo roto y su lobo deprimido, le quedan pocos días de vida.
Samantha Rivera es una beta y e...
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De su parte Abril entró en sueños lista para tener un recuerdo, para ver de nuevo a aquellas extrañas que no resultaban tan desconocidas.
'' Al aparecer en aquel bosque, esperó a que algo pasara, a que alguien apareciera, pero como no daban señales, se cansó y comenzó a buscar por sí misma, hasta que encontró una cabellera castaña familiar que sobresalía de detrás de unos arbustos.
Rió un poco y se acercó para ver a la mujer hecha una bolita mientras se escondía, la miró con la misma expresión de sorpresa que había hecho Samantha cuando le dijo que sí saldría con ella.
Era idéntica a Samantha en muchos aspectos, mismos rasgos, su misma piel, aunque su cabello parecía más rizado y desordenado. Su vestimenta era más que extraña para Abril, una tela oscura que parecía una capa cubría su cuerpo, y dejaba ver poco de la remera y shorts que llevaba debajo, esta vez estaba descalza.
— ¿Neul? —Preguntó, intentando recordar bien su nombre.
La otra asintió, levantándose sin despegar la vista de ella.
— Eres la actual Bich, supongo. —
Abril no estaba segura, pero igual asintió.
La mirada de la beta fue a su cuello, se acercó con cuidado, viendo la marca con precaución; ya no estaba oscurecida como antes, pero sí era de un rojizo oscuro igual de preocupante.
— Hey, pequeña. —Neul tomó su mejilla, sonrió mínimamente.— Vas a estar bien, no vas a sufrir esto por siempre. —
Abril sonrió.
— Samantha me dice ''pequeña.'' ¿Por qué tú también lo dices? —
— Lo más probable es que sí, ¿Samantha es tu predestinada? —
La mayor alzó las cejas, sorprendida.
— Samantha es mi enfermera, mi cuidadora, mi niñera... Es agradable, como una amiga. Conectamos bien, supongo. —
— Estás hablando justo ahora con la primera ''Samantha'' que hubo. Y mi destino fue y será Bich, quien da la casualidad que es la primera... Tú. ¿Cómo te llamas? —
— Abril. —
— Abril, son predestinadas, tanto como lo somos Bich y yo. —
Abril frunció los labios.
— En realidad... No creo que la ame, no lo creo así, yo tenía a mi alfa y no quiero que otro tome su lugar como si fuera un vacío disponible a llenar, es ridículo... Rápido e irrespetuoso. —
