Maneskin 2

XIX: Adiós san Francisco, adiós Aislinn

Al despertar estaba abrazada a Victoria.

-Tu móvil ha sonado varias veces.- Me dijo. Ya estaba despierta antes que yo, entonces. Alargué mi brazo hasta mi móvil, que estaba sobre la mesita de noche y lo encendí. Era Aislinn. Me decía que ya estaba despierta y preguntaba cuando íbamos a ir a la comisaría. Decidí llamarla, aún tenía los ojos algo cerrados y no veía bien la pantalla.

-Buenos días.- Me dijo. La noté diferente, menos agotada y triste. Me alegré.

-Buenos días. ¿Como has dormido?

-Bien, dentro de lo que cabe. ¿Y tú?

-Igual. Oye, yo me iré después de comer así que si te parece me preparo y vamos ahora. Nos tomará un tiempo.- Victoria me miró confundida. No sabía ni con quien hablaba ni sobre qué.- Ah y si te parece bien que venga una amiga mía. Sé que es algo personal pero para no dejarla sola. Como me digas.

-Tranquila, que venga, no me molesta. ¿Nos vemos ahora?

-Hasta ahora.- Le colgué el teléfono.-¿Te vienes a comisaría?

-¿Vais a denunciar lo de Aislinn?- asentí con la cabeza.- Voy. Así la conozco. Dijiste que también vive en Los Ángeles, ¿Cierto? Tal vez surge una amistad de ahí.

-No te precipites, que te conozco. Pero sí, puede surgir una amistad. ¿Vamos? No la quiero hacer esperar.

Nos levantamos de la cama y nos ayudamos mutuamente a elegir la ropa que nos íbamos a poner.

Le envié un menaje al grupo diciendo que Vic y yo pasaríamos la mañana fuera y salimos a la puerta del hotel. Aislinn estaba esperándonos epoyada en la pared.

-Hola.- Nos saludamos a la vez.

-¡Ouh!- dijo Aislinn con el ceño fruncido.- Estáis empezando a sonar de algo.

-¿Måneskin?- Le pregunté esperando que me respondiera si nos conocía o no. Ella me miró todavía con el ceño fruncido.

-Im beggin'... beggin' you..- comencé a cantar.

-¡Me cago en la puta!- exclamó.- Claro que se quien sois, no solo por Beggin'.. acabáis de sacar Supermodel, ¿No?

Sonreí con el hecho de que nos reconociera, no se porqué.

-Sí. Y bueno te presento a Victoria. Que doy por echo que ya conoces.

-Un poco, sí.- Rió.- Encantada Victoria.

-Igualmente. - respondió ella.

De camino a comisaría comenzamos a hablar un poco de todo, para conocernos más. El primer tema que surgió es el del grupo pero más tarde hablamos también sobre Aislinn y otras cosas.

Al llegar estuvimos esperando un rato y luego Vic y yo nos esperamos en la sala de espera mientras a Aislinn le hacían preguntas sobre lo ocurrido.

-Es maja.- Me dijo.

-Sí.- Respondí.

-Y tú estás muy buena.- Añadió seria. Yo no pide evitar reírme.

-Gracias supongo.- Nos miramos a los ojos. ¿Es buen momento para decir que tal vez me estoy pillando un poco?

-¿Como estás?- me pregunta.

-Bien, ¿Y tú?

-¿Bien? ¿Seguro?- enarca una ceja.

-Sabes que no quiero hablar de esto.

-Lo sé.

De repente alguien se acerca hacia nosotras. Una chica de unos catorce años.