ꨄ︎Wolf [Bakutodo]

ఌ︎Capítulo 29

¡Todo sucedió demasiado rápido!

Y en menos de un parpadeo yacía cayendo al vacío junto a Kirishima, a quien le fue imposible el seguir convertido en un dragón, cambiando a su forma humana pero manteniendo las sangrantes heridas en sus brazos que aquellas cuatro flechas le habían dejado.

En un intento de mejorar la situación, recurrió a atrapar a pelos de incendio entre uno de sus brazos, haciendo uso de su magia de explosiones para tratar de desplazarlos y alejarlos del interminable abismo que los esperaba aunque, por desgracia, aún no se encontraban lo suficiente cerca del coliseo, por lo que no le quedaba nada más que rezar a los dioses en su mente de que pudiesen sobrevivir a la inminente caída que tendrían una vez que su don llegase a no ser efectivo.

-¡Deja de posponer lo inevitable!- gritó el maldito de Shigaraki tras reírsele en la cara- ¡Hagas lo que hagas, acabarán los dos muertos! ¡Pero deberías de estar agradecido! Por mí vas a poder reunirte con tu omega al otro lado.

Palabras como esas no le eran para nada de ayuda en esos instantes, razón por la que optó por ignorarlas por completo con tal de enfocarse en hacer lo posible para que pudieran salvarse.

Debía conseguir que al menos pelos de incendio sobreviviera..

No se perdonaría que por su culpa Deku, a quien consideraba como su hermano menor, perdiese a su esposo y que Kiara se quedara sin su padre. Sumado a ello, de por medio estaba su amistad y hermandad con Kirishima, por el que estaba dispuesto a sacrificarse en compensación de todo lo que había hecho este por él.

De lo que estaba arrepentido era de no disfrutar mucho más de ese último beso que recibió de su fresita o de haberle dicho que lo amaba, doliéndole la idea de que, de nuevo, no podrían experimentar una vida juntos como tanto lo deseaba: le hubiera encantado el poder cortejarlo, casarse,tener una familia a su lado y enamorarse del otro cada día como si fuera la primera vez.

Ahora sería él quien lo dejase solo tras su partida..

Partida que se hizo más inminente en el instante en el que, pese a sus esfuerzos, sus explosiones ya no bastaban para elevarlos entre los aires y el abismo cada vez extendía más sus brazos para atraparlos en su oscuro y peligroso manto que no les permitiría escapar jamás con vida.

Fue en el momento en que su mano y magia no pudieron más y en el que de nuevo comenzaron a caer al vacío cuando optó por abrazar a quien veía como un hermano, en espera de que al topar tierra fuese su propia persona quien recibiese el mayor impacto con tal de asegurar que Kirishima siguiera con vida.

Sintiendo el frío viento rozando su rostro con suma rapidez, lo último que hizo fue pensar en su hermoso amiir que esperaba que gozase de una buena vida. Al menos podría estar tranquilo de que este se encontraba en un mejor sitio a comparación de ese futuro del que provenía.

-Perdóname..

Aquella fue su última palabra mientras cerraba sus ojos, sabiendo que este sería su inminente final.