Mi mayor amor. Seoksoo

Lee Seokmin...

Y el hombre guapo del rincón.

Lee Seokmin, estudiante universitario qué trabajaba en una cafetería la cual se encontraba enfrente de un colegio de paga. Tenía muy poco tiempo trabajando en el lugar, era mesero y solía solo estar en el turno de la tarde y asistir en la mañana a clases, planeaba cambiar sus horarios.

Seokmin, tenia un pequeño apartamento en el que apenas entraba él, su sofá y su cama; pequeño si, pero muy cómodo y económico. Desde que su madre había fallecido, se tenía que hacer cargo por si solo trabajando y estudiando. No tenía más familia, solo habían sido su madre y el durante 18 años, y ahora solo era él.

Tenía pocos amigos, las personas en la universidad no solían hablarle casi; había tenido un novio cuando aún estudiaba la preparatoria, pero el chico lo había terminado en cuanto se entero que se pondría a trabajar, en parte porque le daba vergüenza salir con él, y también porque Seokmin no quería acostarse con el.

Terminar con SoonYoung fue todo un alivio para el castaño, ya no tenía alguien que exigiera su atención todo el tiempo, nadie lo molestaba queriendo saber donde estaba, ni tampoco tenía alguien que lo presionara tocando o besando su cuerpo; Seokmin se sentía tranquilo y aliviado estando soltero.

Ahora ya no recuerda si en algún momento amo a SoonYoung o si en realidad no lo hizo, solo sabía que cuando le dijo que si, no estaba para nada convencido y el gusto de tenerlo de novio solo le había durado un año a lo mucho.

-Seokmin! -Exclamó una de sus compañeras de la cafetería cunado llego frente a él en su hora de descanso -¿Será posible que mañana me puedas cubrir en mi turno? -Inquirio la chica, Nayeon coloco sus manos juntas pidiendo, no más bien rogando que le cubriera -Es que necesito hacer algo mañana, y me llevara todo el día... Por favor Seokmin, eres al único al qué puedo recurrir.

-Sabes bien que no puedo Nayeon, en las mañanas voy a clases -Negó repetidas veces mientras volvía a comer.

-Te prometo que te lo recompenso después cubriendote por la tarde -Menciono la chica e hizo un enorme puchero -Anda Seok, eres el único que me puede cubrir...

-No puedo Nayeon, de verdad que...

-El guapo de todos los días esta más tiempo en la mañana, podrías incluso atenderlo -Menciono la chica como último recurso.

-¿De verdad piensas que me interesa más un hombre guapo que es cliente frecuente, qué mis clases por las que me esfuerzo todos los días? -Si, por eso quería cambiar su horario.

-Si, de verdad lo pienso -La chica asintió.

-A que hora empieza tu horario Nayeon, y cuando me lo vas a recompensar... -Menciono ya cansado de las súplicas de su compañera -Podré aprovechar para atenderlo supongo...

-Mi horario empieza a las 10 de la mañana, y te lo recompensare cuando tengas una cita con el guapo del rincón qué se encuentra en la misma mesa de todos los días justo ahora... -La chica se levantó enseguida y corrió para que Seokmin no la alcanzará por no decirle que su futuro novio estaba en la cafetería.

Él castaño casi se atraganta con su comida, pero se levantó mientras tosía y antes de que saliera a ver a su futuro novio, su jefe se le puso enfrente y le hizo señas para que regresará a su comer.