Pov Lucia.
No quiero ver, no quiero ser golpeada por la cruda realidad. No quiero perderla, no quiero que me dejé.
Entre a la habitación con los ojos cerrados, tenía miedo de verla. Se escuchaban los pitidos del monitor que controlaba sus latidos.
Respire profundamente y abrí los ojos. Mis ojos se llenaron de lágrimas rápidamente y un dolor punzante apareció en mi corazón.
Empecé a acercarme lentamente, tomé una silla y la acerqué hasta donde ella estaba. Tenía moratones por toda su cara.
La realidad y el dolor de la misma, no es agradable.
-Elizabeth, mi amor.- intenté llamarla en vano -Cariño, acá estoy ¿me escuchas?- tomé su mano y jugué con sus dedos.
Silencio.
Suspiré.
Sentí un apretón en mi mano y la miré rápidamente. Escuché un gemido y otro.
-Lo... si... siento.- su voz, era un pequeño susurro.
Mis esperanzas se estaban desvaneciendo lenta y dolorosamente.
-¿porque te disculpas amor?-
-yo... no... pu... puedo...- sus ojos estaban cerrados y sus labios agrietados.
Sabía a lo que se refería, pero me dolía - No, tú puedes, eres fuerte.-
-No... más...-
Un gran dolor se alojó en mi corazón y otravez la realidad me golpeaba con mucha fuerza.
-No digas eso Eli- una pequeña sonrisa salió de sus labios.
-Eli- suspiró - Tenías... ti...tiempo...sin... decirme... así- esa sonrisa se desvaneció.
-No me dejes Eli, te lo pido - mis lágrimas salían sin yo poder hacer algo.
-Lu... me... siento... fatal... no podré cumplir... mi promesa - dijo finalmente.
¿De que promesa habla?
-¿Cual?- pregunté.
-La que le... hice a mi hija- abrió lentamente los ojos - Nunca dejarlas.- sus ojos estaban sin brillo, sin vida.
-Amor... inténtalo.- mi voz temblaba y más lágrimas salían de mis ojos.
-Lo siento...- intento levantarse pero no la dejé hacerlo.-Acuérdate de mí, por favor - pidió.
-No te irás a ningún lado.- le pedí con firmeza.
-¿Puedes besarme?- pidió.
-Claro, amor.- sin soltar su mano, me acerqué lentamente a su boca,la besé.
Un pequeño suspiro escapó de sus labios. -Te amo, adios cariño.- su mano dejó de apretar la mía. Las máquinas que estaban haciendo antes los pitidos, dejaron de hacerlo.
La realidad dolía.
-Elizabeth...- no respondía y el sonido de la máquinas no ayuda -¡Amor! - la llamé.-¡ELIZABETH! no me dejes - me aferré a su cuerpo y empezé a llorar incontrolablemente.
***
Tres semanas después.Desde aquel día, no he dejado de llorar. Mañana será el funeral.
Todo me recuerda a ella, su aroma está en cada lugar de la casa. No tengo el valor de irme de este lugar, es el único lugar en el que siento que está conmigo una vez más.
-Mamá, ¿que quieres hablar?- me preguntó mi hermosa hija.
-Amor... yo... - Suspire - Mami... no está más - le explique.
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Mi amor secreto ( Tema lesbi)
RomanceTodo comenzó una mañana de invierno. Bueno hacia tanto frío que sí te bañabas te daba hipotermia en segundos... Bueno disculpen, que son de mis modales. mi Nombre es Lucía. Y les contaré como encontre a mi verdadero amor y al mismo tiempo lo perdía...