En el balcón

63 10 2
                                    

«NARRA OHM»

MOMENTOS ANTES...

Hace mucho tiempo que no hacía estas cosas, debo reconocer que ella es bastante buena en esto, hace que se me olvide toda la frustración que sentía por esta estúpida misión. Ella es tan sexy y atractiva que me fue imposible no dejarme llevar, olvidándonos en dónde nos encontrábamos,sentir sus suaves labios sobre los míos y su lengua serpenteando dentro de mi boca tratando de seguirme el ritmo borra todo pensamiento racional de mi mente dando paso únicamente a la pasión.

— Hace calor, ¿verdad grandote? — me dice Chimon por el audífono

Ahora no Chimon.

Es en lo único que puedo repetir en mi cabeza.

— No me digas que pretendes llegar a segunda base estando aquí.

— Ahhh...esperaba mucho de ti, y no me decepcionas en absoluto, tigre.

— ¿Vas a seguir ignorando la voz de tu conciencia?

No puedo continuar besándola mientras Chimon siga taladrando mi cabeza con sus estupideces. Me detengo de manera abrupta, haciendo que ella se sorprenda.

— ¿Qué ocurre? — me dice con la respiración agitada

— Creo que deberíamos respirar un poco — le digo agitado también

— ¿Estar en un balcón no te da suficiente aire? — me dice con sarcasmo

— Yo creo que deberían estar en una habitación — dice Chimon

— Si estoy contigo, creo que el aire nunca será suficiente — le digo sonriendo falsamente

— Entonces, qué te parece si vamos a un lugar más privado y vemos si ahí también el aire es insuficiente — me dice guiñandome un ojo

La miro con una media sonrisa en mi rostro mientras veo reflejada la determinación en sus ojos, no fue una pregunta, ella está decidida, y ahora, yo también.

— Lamento ser el portador de malas noticias aquí, pero tu tiempo de diversión terminó grandote, debemos iniciar la misión. — suelta Chimon

Maldición, no puede pasarme nuevamente, no cuando estoy a punto de lograr algo interesante en este aburrido lugar.

— Ni lo pienses, Chimon — le digo en un susurro

— El general está a la mitad de su discurso, que es muy aburrido por cierto.

— Debe faltar mucho para que termine, todavía hay tiempo — le digo

— No, no lo hay, debes prepararte e iniciar exactamente cuando termine el discurso.

— Maldita sea — digo con frustración

— ¿Qué pasa? No me digas que no te interesa la idea — me dice ella acercándose y pasando sus manos por mi cabello para terminar bajando hasta mi pecho.

— Claro que me interesa, pero no sé si sea apropiado irnos ahora, el discurso del anfitrión ya ha comenzado. — le digo en un intento estúpido de safarme de la situación sin que se sienta rechazada.

— Pensé que te había quedado claro que lo que menos me interesa en esta reunión es un aburrido discurso, sobre todo, cuando tengo algo mucho más interesante frente a mi — me dice acercándose provocativamente.

Me quedo mirando sus labios sin saber qué decirle, por supuesto que me doy cuenta que es alguien que le importa poco lo que los demás digan de ella, no por nada estábamos casi haciéndolo en el balcón de esta residencia.

— Me queda claro que eres alguien bastante audaz. — le digo separandome

— Entonces ¿por qué te detienes? Y no me digas que es por el estúpido discurso porque no te creo.

Tiene razón. Le estoy mintiendo pero no puedo pensar en otra excusa ahora.

— Sé que quieres lo mismo, pude sentirlo — me dice acercándose nuevamente — en la intensidad de cada beso.

La atracción que emana de ella es casi hipnotizante, no puedo resistirme más, realmente quiero ir más allá sin pensar en nada.

— Soy alguien libre y como dices bastante audaz, así que no tengas miedo, no vas a lastimarme...a menos que te guste jugar rudo — me dice con una atrevida mirada.

— Hora de irnos Ohm — escuchó a Chimon decir por el audífono.

Maldición.

— Me gusta jugar, pero he llegado a mi límite esta noche, aunque debo admitir que fue bastante bueno. — le digo

— ¿Entonces vas a dejarme así?

— Dijiste que no te lastimaría, no me digas ahora que te estoy rompiendo el corazón — le digo con cinismo

— No, pero...nunca nadie me había rechazado de esta manera — me dice con enojo — no vas a ser el primero.

— Yo creo que sí — le digo dándome la vuelta.

— Le diré a todo el mundo que te aprovechaste de mi.

Freno en seco, sabía que ella era de armas tomar pero jamás pensé que llegara a esto.

— ¿Y qué se supone que dirás? — le digo soltando una pequeña risa

— Que pusiste algo en mi bebida y luego me convenciste de venir hasta aquí y trataste de aprovecharte de mí — me dice

— Creo tener varios testigos que podrían decir lo contrario — le digo señalando una terraza cercana — pero tu, ¿al menos tienes un nombre que dar? ¿o cómo es que piensas acusarme?

— Voy a gritar, haré un escándalo, tendrás toda la seguridad sobre ti antes de que puedas poner un pie fuera de esta residencia.

— Hazlo entonces.

— ¿Qué?

— Vamos grita, grita todo lo fuerte que quieras, llama la atención de todo el mundo, así tu querido padre, el señor embajador, se va a enterar de lo que hace su amada hija para divertirse mientras él está presentando su rostro a todo el país. Me muero de ganas de ver su reacción.

— No va a creerte, nadie lo hará, es tu palabra contra la mía.

— Yo no estaría tan seguro...te sugiero que mires para allá — le digo señalando a una de las cámaras de seguridad.

— Pero...cómo...tu...

— ¿En serio me creíste tan estúpido como para exponerme de esa manera sin tener ningún tipo de cuidado? — sonrío — ahora lo entiendo

Ella me mira confundida y con una mirada llena de rencor

— Realmente ha sido un beneficio no decir nuestros nombres.

Veo como la furia de sus ojos se acrecienta cada vez más.

— Ha sido un placer.

— Vete al infierno — me responde

— Nos vemos pronto entonces — le digo guiñandole un ojo

Doy la vuelta para salir tranquilamente de ese balcón, acomodo un poco mi ropa en el camino y al llegar al salón principal tomo otra copa entre mis manos.

— ¿Estás listo grandote? — escucho nuevamente a Chimon — recuérdalo, tienes exactamente ocho minutos antes que...

— Antes que el protocolo de seguridad sea activado...ya lo sé, terminemos con esto de una vez — le digo tomando de un sorbo el contenido de mi copa.

CINDY 💫

Desde las sombras || OhmNanonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora