Rendición

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«NARRA OHM»

- Era un sueño -me digo a mi mismo mientras me limpió las lágrimas que tengo en los ojos.- un maldito sueño. 

Intento incorporarme, me duele la cabeza, todo me da vueltas haciendo que el estómago se me revuelva, respiro profundamente varias veces y cuando la habitación deja de girar logro sentarme.

- ¿Qué es este lugar? -susurro-

Estoy en un viejo cuarto, todo está lleno de polvo, parece como si nadie hubiera estado aquí en muchos años, pero definitivamente perteneció a alguien.

La cama es de metal, la mesa de noche tiene una lámpara rota y llena de telarañas. También hay pequeño sofá en la esquina frente a mi, junto a una ventana que está tapada completamente por tablas de madera que intenté quitar sin éxito.

Un poco más allá hay un armario con libros, muchos libros y al costado de éste un escritorio bastante extraño, tiene como niveles y varios cajones. En las paredes puede verse una que otra pintura, ninguna conocida, parece que fue pintada por alguien con una pésima técnica.

Al frente se encuentra un ropero, parece estar hecho de roble, pues es lo único que aunque esta viejo, resalta entre todos los muebles de este cuarto. Intento abrirlo sin éxito, esta con llave, busco entre los cajones del escritorio pero lo único que consigo es ensuciarme las manos con polvo. Me desespero porque no sé cómo llegué aquí, ni cuánto tiempo ha pasado, voy a la puerta e intento abrirla pero también está cerrada con llave, la cerradura está reforzada.

- ¡Maldita sea! -grito- ¡Qué quieres de mi! -digo golpeando la puerta con fuerza-

Cuando dejo de hacerlo, un sonido llama mi atención e intento identificar de donde viene.

- Eso es...¿un celular? ¡Esta sonando un celular!

Camino por toda la habitación de nuevo, buscando donde está, busco debajo de la cama, en el velador, en el viejo sofá. Abro nuevamente los cajones pero no está ahí, golpeo la superficie con los puños hasta que noto algo dentro de uno de los niveles del escritorio. Una llave. Era pequeña y antigua, miré hacia el único cajón que no pude abrir, puse la llave dentro de la cerradura, hice un poco de fuerza y lo logre.

- Alguien está llamando -digo y decido contestar-

- ¿Hola?

- Al fin despertaste...¿te gusta tu habitación?

- Esa voz, esa maldita voz distorsionada otra vez. -pienso-

- ¿No vas a contestar? 

- Es...un poco vieja para mi, tengo alergia al polvo -toso un poco- tampoco hay luz natural.

- Sé que reconoces alguno de los muebles.

- Es verdad, ahora que veo mejor el escritorio, es un Luis XV, igual que el armario de roble. -pienso- ¿Qué hago aquí? No recuerdo haber venido por mis propios medios -le digo-

- Tuvimos que dormirte, eres muy fuerte...diste mucha pelea Ohm.

- Ahora recuerdo, luego de la propuesta de esa voz, quise escapar y empecé una pelea con uno de los hombres encapuchados que estaban ahí, pronto entraron más y aunque eran más fuertes que yo, no me rendí y seguí peleando. Fue en vano, terminaron por agarrarme, uno de ellos me inyectó algo. Empecé a sentirme mareado y luego todo se volvió negro. -repasaba en mi mente-

- ¿Ya recordaste?

- ¿Para qué llamaste? ¿Estás preocupado por mi? -digo con burla-

- En uno de los niveles del escritorio encontrarás la llave del ropero, ábrelo y saca lo que encontrarás ahí. Sigue todas las instrucciones.

Luego de decir eso, colgó.

Encontré la llave, abrí el ropero, encontré una laptop, unos rollos grandes de papel, al parecer son unos planos, y una memoria USB. 

Abrí la laptop, la encendí, y apareció un logo de lo que parece ser un sistema propio. El celular volvió a sonar, había llegado un mensaje.

"Inserta la memoria USB"

Apenas lo hice apareció un video que empezó a reproducirse.

"Nos vemos nuevamente Ohm, para cuando estés viendo este video sé que tendrás más preguntas que las tenías al llegar, pero es normal, ya irás entendiendo todo. Recordarás que hace algunos días te pedí que robarás algo para mi, no te preocupes, no es algo que no hayas hecho antes; además, será algo que te apasiona mucho. Lo harás bien. 

- ¿Días? ¿Cuánto tiempo llevo aquí? -digo para mi mismo-

En tres días habrá una cena de camaradería en casa del ministro de relaciones exteriores, uno de los embajadores de Reino Unido llegó al país hace un par de días, para afianzar lazos con el gobierno, él y el ministro son grandes amigos, estudiaron en la misma universidad. Toda la crema y nata de la sociedad estará ahí."

- Estás loco -dije- ¡¿meterme a la casa del ministro?! Es como ir a la policía y entregarme yo mismo, no lo haré.

"En tus manos tienes los planos de la casa del ministro, en ellos podrás ver los puntos vulnerables de la casa, el lugar por donde es seguro salir sin ser visto, así como la formación de la seguridad estatal, estarán apostados ahí cuidando todo, pobres idiotas."

- Seguro serán muchos, no podré yo solo. -Hablaba-

"Podrás hacerlo, estudia bien la formación que tienen, por lo demás, lo tienes todo, eres fuerte, alto y ágil...te enfrentaste a mis mejores hombres, les diste una buena pelea aún estando con varios calmantes encima, jamás te rendiste Ohm.

El objeto que quiero que robes es una pintura, un Luis XV, se llama Niño. Está colocado en el salón principal de esa residencia, todo el mundo cree que es una replica que el ministro mandó a hacer al regresar de uno de sus viajes a Francia. La verdad es que él compró la pintura en el mercado negro luego de pedir que la robaran para él.
Colocaron una replica casi exacta, por eso nadie notó que no es la verdadera, y ahora tu la robarás para mi, pondrás la replica exacta, la que siempre debió estar ahí. Para cuando lo noten será demasiado tarde."

El vídeo acabó, no puedo moverme de lo sorprendido que estoy, este hombre verdaderamente enloqueció, y lo peor es que me quiere arrastrar a mi a su locura.

El sonido del celular interrumpe mis pensamientos, contesto sin mirar porque sé que es él.

- En 10 minutos pasarán por ti para llevarte a donde te quedarás hasta el día de la misión, ahí encontrarás todo lo necesario para estar cómodo. No olvides estudiar todo con mucho detenimiento.
Demás está decirte que por más que lo intentes no podrás escapar.

- ¿Cómo estás tan seguro? Ni la interpol ha podido atraparme.

- Sería una lástima que la pequeña Mali sufriera otro accidente antes de que pudieras comprobar si es tu pequeña hermana, y si no lo es, no creo que quieras cargar con la muerte de una inocente en tu conciencia, ¿Me equivoco Ohm?

- No te atreverías

- ¿Vas a correr ese riesgo entonces? ¿No haz perdido a suficientes personas? ¿Volverás a perder a Mali?

Aprieto la mandíbula y el puño en mi otra mano.
Toda mi vida hice todo bajo mi propia voluntad pero por primera vez siento que es inútil pelear, y que lo único que puedo hacer es rendirme.

Desde las sombras || OhmNanonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora