Persecución

54 6 1
                                    

«NARRA OHM»

Bajo lentamente la mirada. Estoy congelado.

— ¡Ohm! ¡¿Ohm, estas bien?! — escucho a Chimon gritar por el audífono

— Estoy bien, no me pasó nada — le digo revisándome el cuerpo

El disparo no era para mí.

— Primera regla, nunca bajes la guardia.

Me sobresalto y con rapidez doy la vuelta mientras saco mi arma.

— ¡¿Quién eres tú?!

— Te muestro mi cara si me muestras la tuya.

Aunque también lleve puesto un pasamontañas, y sea físicamente más delgada, es fuerte y atrevida, me apunta el arma sin ningún titubeo, nada mal para una chica.

— ¡Quién eres!

— No creo que tengamos tiempo para presentaciones — me dice aún apuntándome

— No lo voy a repetir, dime quién eres y qué es lo que quieres — le digo rastrillando el arma en mis manos

— Saber mi nombre no es importante ahora, y lo que quiero, tu no me lo puedes dar — me responde acercándose.

— Si das un paso más...

— ¿Qué? ¿Vas a dispararme? — me dice colocando su cabeza frente al arma — vamos, dispara.

No voy a negar que su actitud me sorprende. No veo ni un poco de miedo en su mirada.

— ¡Dispara! Si realmente vas a matarme, hazlo de una vez, deja de ser un cobarde.

— No soy ningún cobarde, yo no mato a la gente, no soy un asesino.

— ¿Y qué? ¿Debería darte un premio por eso? Porque déjame decirte que, si tú no eres capaz de hacerlo, él sí — me dice señalando al hombre tirado en medio de un charco de sangre.

Me quedo mirándolo un momento, nunca terminaré de acostumbrarme a estas situaciones.

— ¿Cómo pudiste hacerlo?

— Sencillo, sacas tu arma, apuntas y disparas — me dice rebuscando en el cuerpo sin vida.

— Déjate de estupideces, ¡cómo pudiste matarlo así! — le digo tomándola por lo brazos.

— ¡Iba a matarte! Te salvé la vida — me dice soltándose de mi agarre

— Y ahora le has dado un motivo más a toda la guardia para que venga por nosotros y nos persiga hasta acabarnos.

La miro con dureza, sé que probablemente le debo la vida, pero lo que ella hizo nos expone un poco más.

— No pensé en eso, debemos salir de aquí, ahora — me dice subiéndose a la moto.

— ¿Debemos?

— ¿O acaso prefieres quedarte y enfrentar a toda la guardia tú solo?

— ¿Por qué te llevaría? Ni siquiera sé cómo te llamas, o qué es lo que quieres

— Mira estoy tratando de que no nos llenen de agujeros el estómago, si lo logro, responderé todas tus dudas, ahora ¿podemos irnos? — me contesta

— ¿Qué diablos estás esperando Ohm? ¡Sube ya! — me dice Chimon

Subo a la moto y no pasa demasiado tiempo para que la guardia nos siga, haciendo que las balas pasen rozando nuestras cabezas.

— ¡Maldita sea! — digo — debemos perderlos de una buena vez.

— Gira aquí — me dice ella — ¡más rápido, maldición!

Desde las sombras || OhmNanonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora