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⚠️Advertencia : esta historia contiene; leguaje inapropiado y contenido sexual
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Me llamo __(tn) Pochettino, soy la hija menor del Mauricio Pochettino el actual director técnico del Chelsea.
Essta es mi historia con Ben Chilwell.
[...]
Desde que mi padre asumió en Chelsea (no hace muchos meses) , uno de los jugadores que él entrenaba me despertaba ciertas sensaciones desde hace mucho tiempo y sé que yo a él también por varios sucesos que ocurrieron estos meses.
Ben es un hombre alto, de pocas palabras, con un cuerpo de ensueño, unos brazos fuertes y divinos ojos azules, es uno chico divertido cuando esta con sus amigos pero muy timido frente a los que no le conocen, estoy tan enamorada de él que he investigado un poco sus gustos, lugares donde frecuenta y hasta tengo su numero telefonico (se lo robe a mi padre).
Nunca pasó nada entre nosotros porque mi padre nunca me dejaba ir a los entrenamientos o las cenas del club. Hasta creía que nunca se me darían las cosas ben , estuve apunto de perder las esperanzas hasta que un día mi padre nos avisó que usaria la casa para entrenar a los jugadores ya que el equipo venía bastante bajo de puntos y estaban teniendo una de las peores rachas que tuvo el club en años.
Nadie más que mi amiga de la facultad y mi prima sabian de mi enamoramiento por Ben.
Ademas temia que mi padre se entere que a su hijita menor le volvía loca uno de sus jugadores . Conociendolo era tan exagerado que renunciaría y volvíamos a Paris otra vez o en el peor de los casos me enviaba a un internado lejos de todos con tal de que terminará mis estudios y no saliera con ningun jugador de futbol.
Según él, todos los futbolistas son igual, infieles , mentirosos , sobradores y superficiales, pero lo que más ironico es él que no hace mucho tiempo fue jugador.
En fin, mi enamoramiento por Ben Chilwell seguío intacto hasta que un día recibí una llamada de mi padre , avisandome que Ben estaba en la puerta de casa y que le avisara que se suspendia la práctica de hoy .
Sonrei en mis adentros, hoy finalmente seria el gran día...
Abrí la puerta con una sornisa encontrándome con el británico más sexy que mis ojos vieron , iba con una playera holgada y un short deportivo, despues de saludarnos le invité a sentarse en el sofá, se sentía la tensión sexual entre nosotros, pero miraba a los lados y revisaba su teléfono con tal de no hablar conmigo.
Frunci el ceño aun no entendía como mi padre no le había avisado, era extraño ya que tenian un grupo donde avisaban todo lo relacionado con el equipo.
