Lo ví mirarme exasperado, cruzó sus brazos mientras me observaba, intenté sostener la mayor cantidad de tiempo la pequeña bola de energía que me había lanzado, hasta que mi energía cedió y aquella energía finalizó su recorrido alcanzado mi pecho, mi camiseta ardió ante el contacto y mi piel fue decorada por leves quemaduras.
Apreté mi mandíbula conteniéndome de ser grosero con él, ya era la décimo cuarta vez que mi magia fallaba
Restregué mi rostro sintiendo aquellas voces nuevamente, estaba tan cansado, ya no era enojo o dolor, era tan solo frustración. Toda esta mierda me abrumaba, me sofocaba por completo.
A veces era como si no lo estuviese ni intentando, pero joder lo hacía, cada segundo en el que seguía respirando, me costaba toda mi poca fuerza de voluntad. Lo estaba intentando, pero aún así nada resultaba, mi magia no funcionaba, mi parte animal era inexistente, y ya no era un celestial.
¿Qué demonios era?.
Era una extraña mezcla de todo y nada al mismo tiempo, no podía hacer lo que él hacía, pero tampoco puedo hacer lo que antes hacía. No me gustaba ser egocéntrico con mis propias habilidades, pero maldición..
Era capaz de todo.
Era el celestial más temido, por eso me habían asignado la misión de bajar a la tierra aún conservando mis alas. Habían confiado en mi.
Ahora solo sabía llorar y lamentarme, era un patético mártir mal hecho. Tenía a Blake enseñándome todo como mi jodido padre, me sentía tan débil estando a su lado.
Joder qué..
Lo miré unos segundos dejando de restregar mi rostro con tanta euforia, aún permanecía cruzado de brazos pero no se veía molesto, se veía dolido, aunque descifrarlo aún era difícil.
No quería sonar tan egoísta al decir que me dolía estar a su lado por lo poderoso que era, pero tan solo me sentía más pequeño e insignificante, él era tan invencible y poderoso.
— No va a funcionar Blake, no entiendo porqué seguimos intentándolo. — me acerque a él ya que estábamos a algunos metros de distancia para que su ataque no me dañara tanto.
— No lo estás intentando. — hizo un movimiento con sus manos dejándolas caer a cada lado de su cuerpo. — No lo intentas, eso es lo que sucede.
Suspiré pesadamente revoleando mis ojos, no iba a tener esta discusión nuevamente, hace semanas que seguía persiguiéndome con ese discurso de mierda.
Asentí dándole la razón, me encogí de hombros y caminé nuevamente hacia el auto. El camino de vuelta fue silencioso, no dijimos nada, tan solo puso música, nuevamente algún artista que desconocía como casi todo de él.
Bajamos en aquel eterno y denso silencio, yo me dirigí hacia la habitación y él se quedó en la sala haciendo quien sabe qué. No le preguntaría, porque no me lo diría, así que tan solo espere a qué sea de noche para que nuevamente se vaya para regresar muy casualmente cubierto de sangre.
Al caer la noche, me quedé sentado en la cama sin hacer nada, solo miré la pantalla del televisor en negro por horas como fuese lo más interesante que mis ojos han visto.
Estoy tan jodidamente cansado, de todo, quizás de la vida en general.
Ya no tenía razones válidas, tal vez jamás las tuve.
— Por dios..¿en qué mierda estoy pensando?.. — murmuré asqueado de mi propia voz.
Escuché a alguien tocar la puerta, Blake jamás instaló el timbre porque quería que me esforzara por mantener los sentidos que aún me quedaban, mi audición era uno.
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Sam - Entre sangre y cenizas. (Entre mundos parte II)
FantasíaContinuación de entre mundos. Este es el segundo libro de la saga. El primer libro está en mi perfil :) El día en el que el ángel finalmente cayó, aquel ser celestial, con tanta luz, que era incapaz de asesinar, cometió el peor de los pecados. ¿Pod...