La verdad saldrá a la luz ||Taegi

07

Taehyung caminaba por las calles de Daegu. Le hubiese gustado decir que le traía buenos recuerdos y una sensación de nostalgia en su pecho. Sin embargo lo que sentía era una enorme tristeza y sentimiento de desolación en su interior. Su Alfa interior, suplicando por dejar todo de lado y buscar a YoonGi hasta por debajo de las piedras.

—Suficiente. Concéntrate Kim. —Se dijo Taehyung a si mismo, irritado por sus propios pensamientos.

Debía concentrarse. Había regresado a Daegu para conocer a los padres de quien seria su prometida, no para buscar a su amor de la infancia y parte de su adolescencia.

«Porque YoonGi jamás sería su Omega».

Suspirando, Taehyung sacudió todo tipo de pensamiento innecesario de su cabeza, y se enfocó en buscar una florería. Según el navegador en su teléfono, la más popular por sus excelentes productos de encontraban a pocos metros de distancia, por lo que había optado por dejar su auto en el estacionamiento y caminar hasta el establecimiento.

Al entrar, un aroma extremadamente familiar golpeó en su nariz, haciéndolo estremecer casi de manera instantánea. Su corazón dio un vuelco al momento de conectar su mirada con la del chico que atendía en aquella floreria. Era YoonGi, su YoonGi. Su aroma mucho más dulce y seductor de lo que recordaba, uno totalmente apropiado para un Omega. Porque aunque no había tenido comunicacion con él durante los últimos quince años, Taehyung sabía que YoonGi era un Omega. Enterandose hace un par de años gracias a un antiguo compañero de clases qué se había topado con el en un restaurante de Seúl.

—¿Qué haces aquí?

Taehyung volvió a la realidad al momento de ver la cara de YoonGi. Una donde demostraba lo mucho que le desagradaba su presencia en el local. Y entonces Taehyung enfureció, recordando todo y convirtiendo los bonitos sentimientos que sentía en unos mucho más agrios y amargos.

—No creas que estoy aquí por ti. —Respondió Taehyung a la defensiva —. Estoy aquí para comprar un ramo de flores para mi prometida. —Dijo esto último recalcando la última frase.

YoonGi enarco una ceja y cruzandose de brazos, el respondió:

—¿Y tenías que venir justo a esta florería para eso?, hay muchas otras por esta misma calle.

—No sabía que trabajabas aquí.

—No trabajo aquí. Soy dueño del local.

—Eso tampoco lo sabia.

—Bueno pues ya lo sabes. Así que puedes irte.

—¿Qué clase de vendedor eres?

—Uno que no quiere verte.

—¿Tu a mi? —Taehyung soltó una risa sin humor —. Por favor, no me hagas reír.

—No quiero hacerte reír, quiero que te vayas. —Dijo YoonGi sin ningún atisbo de emoción.

—No iré a ningún lado, no hasta que vendas mis flores.

—Hay otros puestos por ahí.

—Yo quiero comprarlo aquí.

YoonGi suspiró, comenzando a irritarse.

—Bien, ¿qué quieres comprar?

—El ramo más grande y costoso qué tengas.

—Te lo venderé el doble de caro.

Taehyung sonrío con autosuficiencia.

—El dinero para mi no es un problema. Puedo incluso comprarte toda la florería y me alcanzaría para unos diez más.

—Vaya. Me he enterado de otra cosa más que no me interesa. —Respondió YoonGi poniendo los ojos en blanco antes de darse la vuelta y traer lo que le pidió —. Toma.

—Bien. —Taehyung asintió sacando 500 mil wones —. Puedes quedarte con el cambio, por los viejos tiempos.

—¿Creés que esto alcanza?, creí haberte dicho que era el doble de caro  para ti.

—Ten. —Dijo Taehyung sacando el resto de dinero y colocándolo sobre el mostrador. Agarro el ramo y se retiro del lugar sin decir una sola palabra más.

Una vez que se fue, YoonGi agarro el dinero y lo tiro al piso, tragado el nudo qué se formaba en su garganta mientras que la marca en su cuello comenzaba a arder. Su piel se sentía caliente, y podía sentir su entrada lubricar. Lo cual era malo, pues no se suponía que llegara su celo aún.

—No puede estar pasando esto. —Susurró YoonGi, dejándose caer en el suelo y cubriendo sus ojos con sus manos.

No podia creer que Taehyung finalmente hubiera regresado.