Ella sabe como hacer caer a un hombre con facilidad.
Posee el encanto natural que cualquier mujer desearía tener.
Es hermosa, atrevida, sensual, cautivadora y sobretodo manipuladora.
¿Quién diría que terminaría relacionada con uno de sus pilotos fav...
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Abrí la puerta y lo primero que vi fue a Carlos sentado en el sofá de cuero. Se encontraba sentado con los codos apoyados en sus piernas y sus manos sosteniendo su cabeza mientras estaba en dirección hacia el suelo, por su cabellera no lograba distinguir si se encontraba con los ojos cerrados o si veía sus zapatos.
No hizo falta decir o hacer algo ya que el sonido de la puerta lo hizo reaccionar provocando que alzara la mirada a mi dirección y nuestras miradas conectaron. Sus manos poco a poco se alejaron de su cabeza y sus espalda pasó de estar erguida a estar completamente recta. Podría jurar que su mirada lucía apagada, cosa que jamás había visto en ellos. Di un paso hacia adelante al momento de ver como Carlos se ponía de pie y caminaba a mi dirección.
-Less...- pronunció mi nombre y al volver a escuchar su voz fue como una puñalada.
Esa voz me había torturado todos estos días antes.
No quería verlo a los ojos porque sabía que me pondría a llorar como una niña pequeña y le reclamaría por todo lo que me había hecho. Sabía perfectamente que si me liberaba ante él, todo el motorhome se enteraría, porque sí, quería gritarle y decirle lo mal que la había pasado a pesar de haberme distraído con mis amigos.
-Caco, por favor, cierra la puerta. No quiero que vengan los de Netflix a querer hacer su show- habló dirigiéndose a su primo.
-Claro, estaré acá afuera por cualquier cosa- dijo él y segundos después el sonido de la puerta cerrándose se escuchó por toda la habitación.
Apreté con fuerza mi bolso con ambas manos mientras a la nada tratando de evitar verlo.
-Te ves hermosa- escuché. Su voz estaba apagada y pude detectar un poco de miedo al darme el cumplido.
Respiré profundo y me aclaré la garganta para no hablar con el nudo en la garganta que se había creado.
-No tienes idea de la vergüenza que siento de estar acá pidiéndote un favor luego de todo lo que ha sucedido- mi voz salió un poco temblorosa debido a los nervios y las ganas de llorar que estaban invadiendo mi cuerpo.
-Less...- dio un paso hacia mi y yo retrocedí uno interrumpiéndolo.
-Pero como ves, estoy entre la espada y la pared. Se que esto es ridículo y no sabes cuan estúpida me siento- proseguí mirando a la nada para mientras aguantaba las ganas de llorar -Todo mi orgullo se ha ido a la mierda y me siento la persona con menos dignidad al estar de pie ante ti pidiendo que finjamos la hermosa y perfecta relación que claramente no teníamos- mis ojos se habían cristalizado al decir lo último.
-Tuvimos una relación hermosa, Less-
Una risa de burla salió de mi como si hubiese escuchado la mayor estupidez del mundo.
-Una relación en donde me fuiste infiel. ¿A eso le llamas tener una relación hermosa?- esta vez lo miré a los ojos y sin querer las lágrimas comenzaron a salir -¿De verdad crees que tuvimos una hermosa relación después de todo lo que me hiciste?- un sollozo salió de mi y rápido me tapé la boca.
