Ella sabe como hacer caer a un hombre con facilidad.
Posee el encanto natural que cualquier mujer desearía tener.
Es hermosa, atrevida, sensual, cautivadora y sobretodo manipuladora.
¿Quién diría que terminaría relacionada con uno de sus pilotos fav...
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Habíamos decidido irnos de la fiesta.
¿A dónde? A su habitación de hotel que quedaba más cerca que mi apartamento.
A decir verdad estaba que no aguantaba las ganas de que me hiciera suya.
Cuando llegamos a la habitación lo primero que hice fue tirar mis cosas hacia la mesa que estaba al entrar.
Carlos cerró con seguro y yo caminé más adentro de la habitación seguida de él. Me quité rápido los pendientes ya que no quería interrupciones y los arrojé al cerca de la mesita de noche.
Me tomó de la cintura provocando que diera media vuelta hacia él y me besó con desesperación elevando mi cuerpo para que enredara mis piernas en su cadera y mis manos alrededor de su cuello atrayéndolo más a mis labios.
Caminó al sofá sentándose haciendo que yo quedase sobre él y comencé a moverme para que nuestras partes se frotaran a través de la tela.
Mi vestido era corto así que aprovechó para colocar sus manos en mi trasero elevando la tela del vestido y que esta subiera hasta mi cintura. Con sus manos apretó mis trasero para frotarme con más presión sobre él.
Bajé mis labios hasta su cuello y lo besé a la vez que mis manos sacaban su camisa que estaba abajo de sus pantalones y cuando lo logré, arranqué los botones para dejar en descubierto tu torso. Me separé para ver su piel y mi excitación aumentó.
¿Por qué este hombre es tan perfecto?
Jamás me había sentido tan atraída por alguien en mi vida, creí que nunca llegaría ese momento pero ahora lo tengo aquí, con su cabello revuelto, jadeando, con su camisa abierta mientras sus manos juegan con mi trasero como un niño pequeño entretenido con su juguete.
-Necesito chuparte la polla- dije cerca de su oído.
No sé de dónde me había salido decirle eso pero de verdad tenía ganas de todo con él en este momento.
Me puse de pie y me acerqué a sus labios para besarlo mientras quitaba el cinturón con desesperación. Cuando lo logré, Carlos se bajó los pantalones junto a sus bóxers y me dejó ver sus piernas y mordí mi labio inferior al verlo así.
Lo miré ansiosa y me puse de rodillas metiéndome entre sus piernas.
Me acerqué a su miembro ya erecto debido a nuestros roces segundos antes.
Agarré su miembro y comencé a acariciarlo de arriba hacia abajo y acerqué mi rostro mientras lo miraba a los ojos y él veía como tomaba su pene con mi mano y lo acariciaba y rápidamente veía mis ojos y luego regresaba la vista a su miembro. Sonreí con malicia al sentir su desesperación y me apresuré a abrir mi boca y rozar mis labios por todo el tronco hasta llegar a la raíz.
Saqué mi lengua y lamí desde la raíz hasta el glande provocando él un gemido y que su cuerpo se tensara y metí la cabeza en mi boca y lo saqué haciendo el famoso sonido de 'Pop' y luego lo metí por completo a mi boca.
