Ella sabe como hacer caer a un hombre con facilidad.
Posee el encanto natural que cualquier mujer desearía tener.
Es hermosa, atrevida, sensual, cautivadora y sobretodo manipuladora.
¿Quién diría que terminaría relacionada con uno de sus pilotos fav...
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Me encontraba en el paddock caminando mientras sonreía y saludaba a algunas personas que se acercaban a mi, sentía muy extraño que me pidieran fotos o autógrafos, ni siquiera tenía uno.
-Te ves muy linda, estuviste muy bien en el desfile- dijo una chica que parecía casi de mi edad.
-¡Oh, gracias! Para ser mi primera vez no estuve tan mal- me reí y ella negó.
-Estuviste genial- dijo -Oye, te presentas en todas las carreras, ¿eres invitada especial o vienes con alguno de los chicos?- preguntó sin parecer entrometida.
-Less, vamos, no hay tiempo- dijo Sam y yo asentí.
-Me tengo que ir, un gusto, linda- me despedí y ella sonrió un poco apenada.
-Gracias por la foto, Alessa- se despidió y yo seguí caminando.
-Ya es la cuarta persona que te pregunta lo mismo- dijo Sam bebiendo de su café.
-Es lógico, desde que me he vuelto una "celebridad"- hice comillas -Creen que ando aquí por alguien cuando siempre he andado por acá-
-Recuerdo cuando le cambiaste el vuelo a mi entonces novio, él iba a Rusia- dijo con diversión.
-¿El tímido Greg era tu novio?- pregunté incrédula y ella soltó una carcajada.
-Si, pero créeme, de tímido no tenía nada- dijo con picardía.
-Alessa, regálame una foto- se acercó un chico y yo posé -Gracias- dijo contento y yo sonreí para seguir caminando.
-Era tímido con las tripulantes fuera del trabajo- dije recordando.
-Es porque le había dicho que no quería que hablara con ninguna tripulante- dijo riendo.
-¿Y tú con cuántos te acostaste mientras andabas con él?- ña diversión llegó a mi voz.
-¿De verdad quieres saber?- me miró para dar un trago a su bebida.
-La verdad, no- dije y una risa salió de ambas.
-Gracias a Dios porque perdí la cuenta luego de 8- dijo alzando los hombros y yo la miré incrédula.
-¡Sam!- golpeé su hombro empujándola y ella comenzó a reír.
-¿Qué!- se puso de nuevo a mi lado.
-Eres increíble- dije rodando mis ojos.
-Alessa, hola- dijo una chica pasando a mi lado y yo saludé.
-Hola- sonreí saludando con mi mano.
-No te creas, la verdad es que no le fui infiel nunca- dijo pasando su brazo por mi hombro -Si, lo sé, puede ser un poco creíble- me miró -Solo duramos un mes- dijo sin importancia.
Comencé a reír y bebí del matcha.
-Mira, ahí está Max- dije señalando de manera discreta -Vamos, quieto saludarlo- caminé más rápido para llegar a él.
