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- traje la cena- anunció el alfa entrando al departamento que compartía con su omega

YoonGi vio con fastidio las luces apagadas y gruño molesto por el silencio de la sala mientras se descalzaba, sin molestarse en buscar sus pantuflas se adentró a la sala de estar

- otra vez- gruñó

Lanzó el portafolios sobre la mesa y se dejó caer en el sofá

- el mocoso se volvió a ir con ese imbécil

Molesto era poco para decribirlo, ya estaba harto de esa situación

Habían pasado unos meses desde la boda y las cosas habían tomado un ritmo más tranquilo

Era un hecho que no podía hecharle guante a la herencia de Jimin hasta que se cumpliera el tiempo establecido, resignado, empezó un nuevo plan

Se quedaría al lado del omega durante ese tiempo, esperando hasta que recibiera su fortuna entonces le quitaría todo y se divorciaria

Jimin era bueno y condescendiente, si no hubiera alguien en su corazón, no le seria tan difícil poner sus ojos en el, contrario a lo que creyó, era un buen compañero, dulce y comprensible, cuando se divirciaran pensaba dejarle una buena cantidad de dinero, la suficiente para que Jimin se pudiera establecer y puede que hasta para que abriera un restaurante propio

Se estaba esforzando en su nueva carrera, a pesar del cansancio podía notarse su emoción al volver de cada lección, y por supuesto que YoonGi de igual forma se beneficiaba al ser su critico personal, no sabia una mierda sobre gastronomía pero si sabía apreciar una buena comida

Era extraño ver al omega desenvolverse cada día más, sé estaba volviendo independiente y más seguro, contrario al niño tímido que conocía meses atrás
De cierto modo le agradaba verlo superarse

Estar con Jimin era de algún modo un descanso de toda lo porquería y acoso que debía llevar en su nuevo trabajo, el omega solía esperarle para cenar y charlar un poco mientras veían algo en la televisión o para leerle un poco, lectura que siemore terminaba con ambos dormidos en el sofá

Sin embargo, esa rutina amena que habían estadó llevando se vio afectada por Sungwoon, el alfa planeaba volver al extranjero donde estaría por un tiempo indefinido, Jimin había estado pasando las tardes con él, Sungwoon lo arrastraba a su lado con la mediocre excusa de aprovechar el poco tiempo que le quedaba en el país

Eso hacia su sangre hervir, Jimin era su esposo tenia que pasar el tiempo libre con él no con su estúpido mejor amigo que quería cogerselo

Hasta había comprado comida para que no tuviera que cocinar y que descansara, y ese era el pago que recibia

Destapó la cajita que contenia la comida china con brusquedad, desquitando en ella la rabia que sentía, tomó entre los palillos una gran cantidad de fideos, masticaba con fuerza imaginando que destrozaba el larguirucho cuello de Ha

- ah, Hyung, eres tú

Estuvo a punto de atragantarse cuando el omega apareció desde el pasillo, usaba un pantalón corto amarillo y una camisa rosa con el dibujo de un osito estampado, sus cabellos en ese entonces morados estaban sujetos con un pañuelo azul, por el polvo en sus pantuflas y ropas, más las cajas que sostenía, entendió que había estado limpiando

- Pensé que llegarías más tarde, no preparé la cena, perdón

- ¿No fuiste con Sungwoon?

- woonie me invitó pero debía hacer algo de limpieza y además extrañaba pasar tiempo contigo, por la universidad y tu trabajo ya casi no nos vemos, si no es hasta la hora de dormir

Mi Fortuna ||Yoonmin||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora