⦗𝐄𝐱𝐭𝐫𝐚 𝟏⦘ 一𝐊𝐚𝐫𝐦𝐚.

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Su corazón late en su pecho con tanta fuerza que siente que se saldrá. Duele. Le golpea las costillas como si quisiera astillarlas, pero igual se queda inmóvil.

Tic, tac.

El reloj en la pared suena. El segundero avanza. El sonido rebota contra sus tímpanos e inunda el salón de clases.

Tic, tac. Tic, tac.

No escucha nada más. No hay nada más que escuchar. La boca de todos está sellada. Todos los ojos están encima suyo.

¿Qué es esta situación? No entiende qué pasa. Acababa de llegar a ese colegio hace apenas unas semanas y todo iba bien. Todo iba como lo planeado. A todos les agrada.

Todos aman a Heather Daniels.

¿Entonces por qué...?

La pregunta se queda en el aire. No hay respuesta. Nunca se formuló en voz alta en primer lugar, a pesar de estar escrita en todo su rostro.

Tic, tac. Tic, tac.

El aire es pesado. Se está asfixiando. ¿Por qué todos siguen mirándola? No lo sabe. No sabe nada. No entiende nada.

Esto no debería estar pasando. Esto no puede estar pasando. No otra vez.

Tic, tac. Tic, tac.

El sonido se hace más fuerte, como una bomba apunto de estallar, a pesar de que ella no se ha acercado. No ha abandonado su lugar frente a la puerta. Ni siquiera pudo poner pie en el salón cuando las miradas de todos la juzgaron en silencio. El odioso reloj empezaba a desesperarla. "Alguien diga algo, por favor." Pero no hay nada. No pasa nada. Solo ese maldito segundero.

—¿Qué pasa? —se atreve a preguntar al fin, cuando el silencio amenazaba con volverla loca. Su voz sale en un susurro, y sus manos no pueden evitar apretar los bordes de su falda, jugando con ellos ansiosamente.

Entonces, como si todos estuvieran poseídos por la misma mente, voltean a mirar a la misma persona; un chico rubio en la esquina de la habitación con su celular en la mano.

Rubio.

Todos son rubios.

Maldita sea, odia a los rubios.

El chico se acerca. Su rostro apunta al suelo, como si no fuera capaz de ver en su dirección, y le ofrece el celular. Hay un video en la pantalla. Ella es la protagonista. Frente suyo hay un grupo de chicas, y reconoce a una de ellas como Sakura.

"¿Cómo es que...?"

Le da play. El silencio abandona la sala. En cambio, es reemplazado por gritos. Sus gritos. Las peores atrocidades salen de su boca, dirigidas al grupo de pobres chicas que parecen aterradas. Entonces la Heather del video se detiene, mirando alrededor como si hubiera dejado al aire algo que no debería, y la Sakura en la grabación murmura algo que no alcanza al micrófono, pero ella recuerda perfectamente.

"¿Por qué dirías algo tan cruel? Yo solo quería ser amable."

Oh, claro que lo recuerda. ¿Cómo podría olvidarlo? Se había marcado como fuego en su memoria, junto con esa mirada de victoria que el grupito entero le había dedicado.

El video se detiene. La quietud vuelve al salón. El reloj vuelve a escucharse.

Tic, tac. Tic, tac.

Revisa las vistas y los comentarios. Cientos, no, miles. Miles de personas que la vieron romper personaje. Miles de personas que escribieron en comentarios. Miles de personas que conocieron su verdadera naturaleza.

¿Cuándo fue que subieron ese video? ¿Cuándo lo grabaron?

El rubio le quita el celular y las miradas se hacen más pesadas. De repente ya no puede respirar. Es como aquella vez en el hospital, que su cuerpo dejó de responderle y su cabeza se puso densa. Mantenerla en su lugar era un reto, sus piernas perdían el balance y sentía que en cualquier momento caería de lleno al suelo, pero seguía paralizada.

En un momento como ese, moverse aunque sea un poco sería sentenciarse a sí misma a pena de muerte.

Era como estar en el medio del bosque rodeada por lobos. Le gruñen hostilmente y le muestran sus colmillos. Alistan sus garras para saltarle encima y atacar. Se preparan para acabar con ella y despedazarla viva.

Tic, tac. Tic, tac.

Pero el tiempo se acaba. Las bestias atacan. El reloj deja de escucharse bajo la ola de gritos y la bomba finalmente estalla. No se compadecen de ella. No miden sus ataques. ¿Por qué lo harían? Solo necesitan deshacerse de la amenaza.

Huir es inútil.

Escapar es una pérdida de tiempo.

No importa que tan lejos corras, tu karma siempre te alcanza.


Esta medio cortico pero no tenía ganas de escribir algo extenso sobre ella

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Esta medio cortico pero no tenía ganas de escribir algo extenso sobre ella. Lo hice más que todo porque les dije que les dejaría un extra de la vida de Heather siendo arruinada y pues esto fue lo que salió, aunque si me gustó bastante. Espero les haya gustado también.

Postdata: Si, sé que lo subí un día tarde. Pidoperdon, últimamente he tenido más tarea que vida 😭

𝕬𝖙𝖙፡ 𝕴𝖟𝖆𝖆𝖗𝖈

𝐇𝐞𝐚𝐭𝐡𝐞𝐫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora