Capitulo 3

569 66 5
                                    

Pasado

Ver a su madre partir no era para nada fácil, verla tomar las maletas porque ya no podía cuidar de ellos lo hacía sentir rabia, pero a la vez lo hacía sentir triste, ver a su pequeño hermanito llorando y suplicando a su madre que por favor no lo hiciera, que no los fuera a dejar solos.
Hizo que Hoseok la odiara más ¿Como podía ser tan cruel? ¿Acaso no se daba cuenta de lo que estaban sintiendo?

Sentir ser aquel sentimiento de abandono no era nada bonito, preguntándose cada día ¿Que habían hecho mal? ¿Acaso no fueron suficientes? Pero, la vida tenía que continuar, con tan solo 12 años tenía que hacerse cargo de su hermano, con tan solo 12 años tenía que tomar una responsabilidad que no le tocaba y ver a su hermano de 8 años llorar, lo hacia querer por un momento que todo se detuviera. Que todo fuera una simple broma, dónde en cualquier momento llegaría su madre para decir que si los amaba, que había sido una broma para que se divirtieran un poco.
Pero, eso nunca pasó, así que se puso a la tarea de buscar algún trabajo, de lo que fuera y a su corta edad, trataba de hacer cualquier cosa.

Claro que al pasar algunos días no había encontrado nada, con su hermano muriendo de hambre, había una sola solución, una simple y muy mala solución. Dirigiéndose hacía aquel burdel, era muy bueno bailando así que esa era la única opción que le quedaba, si querían comer, tenía que hacerlo, habían muchos alfas pedófilos que les encantaría ver a un alfa de doce años vestido con algún traje, moviendo su cuerpo en aquel tubo. Para luego pasar sus asquerosas manos por su cuerpo, como si fuera un maldito trozo de carne.
Al terminar el turno siempre terminaba llorando, pero al ver la buena paga, sabía muy bien que tenía que seguir, que lo haría todo por su hermano.

...

Mientras que al otro lado de la ciudad, en la zona residencial donde vivían las familias más adineradas del país, estaba un pequeño Omega buscando la manera de que dejara de dolor, que aquellos golpes que le propinaba ahora su padre dejarán de doler, todo por ser un Omega fácil, ¿Que tenía de malo enamorarse de Jungkook? Además era solo un niño, que no sabía la diferencia del cariño y amor. Cuando se es muy pequeño y no tienes el amor de tus padres, cualquier muestra de afecto te parece la gloria.
Solo que Jungkook revolviera su cabello con ternura, solo que tomara su mano para jugar o simplemente que le sonriera, esos pequeños detalles hacía que su corazón se sintiera cálido, hacía que muy en el fondo todo se quedará así.

– ¡Papá, ya basta! – se acercó Namjoon para evitar que siguieran golpeando a su hermano – papá, por favor– pero el alfa recibió igual un golpe de su padre.

A lo que Taehyung se levantó con dificultad.

– N-no, papi – le decía a su padre con lágrimas en los ojos – yo pedo aguantal, a mi hemano no pegues.

– Como quieras, maldita cualquiera – le dió una fuerte bofetada, que hizo a su labio sangrar.

(...)

Actualidad

Caramelo, podía percibir un delicioso aroma a caramelo, mientras que estaba con aquella hermosa Omega cenando en aquel restaurante, quería dejar de sentir, quería dejar de pensar, solo quería ignorar todo.
Así que ignorando todo lo que le rodeaba, apreciaba la belleza de la Omega, con ese vestido azul marino ceñido a su cuerpo, con su cabello castaño bajando en ondas,  apreciando cada detalle, sus labios de un rosa, listos para poder besarlos.
Así que cuando terminaron la cena no perdió la oportunidad, la tomo de la cintura para sentir los labios de la chica, sintiendo como sus brazos rodeaban su cuello y sus delgadas manos empezaban a acariciar su cabello, no era lo mismo, no se sentía igual, pero estaba pidiendo con todas sus fuerzas que su lobo lo aceptará.

Hobi, detente, lo vas a lastimar.
Le rogó su lobo.
Por favor, no sigas con esto.

Él me lastimo primero.

Ignoro completamente a su lobo, luego sus manos se dirigieron al trasero de aquella chica, escuchando como gemía en sus labios, sintiendo como su lengua se adentraba a su boca.

– ¿Quieres ir a mi apartamento, alfa? – le dijo coqueta.

– Claro que sí – no lo pensó dos veces, solo quería que todo acabará de una vez.

Subiéndo a la chica a su hermoso auto plateado, claro que los vidrios polarizados y las ganas que tenían los dos, no los dejo llegar a aquel apartamento, cuando la chica ya estaba subida de él moviendo sus caderas en un delicioso vaivén, no podía aguantarlo más.
Así que no supo en qué momento la chica ya no tenía aquel vestido, no supo en qué momento ya tenía su miembro por fuera para adentrarse en la vagina de la chica, no sabía en qué momento ya estaba dando embestidas escuchando los gemidos descontrolados de la Omega. Trabajaban juntos, desde que llegó la chica había estado cortejandolo, pero por alguna razón no se sentía bien, así que cuando sintió su nudo formarse y vio como la chica exponía su cuello.

– Márcame, alfa – pedía con desesperación.

"Amor, lo siento, puedes marcarme otra vez, puedes hacerlo, mi amor"

¿Por qué tenías que invadir mi cabeza en este momento?

Hoseok, detente.

Déjame en paz, que todo esto paso por culpa tuya.

(...)

Sintió como su pecho se contraía, sintió las inmensas ganas de vomitar y como su cuello empezaba a arder de la peor manera, jamás había sentido algo así ¿Que estaba pasando?
Corrió hacia el baño para poder vomitar, hasta que se vio en el espejo, como aquella marca que casi no se notaba estaba sangrando, ¿Que paso?

Tomo su celular, fue difícil ya que estaba temblando del miedo, hasta que pudo marcar a Rosé, contándole lo que le estaba pasando.

– Tae, lo siento mucho – el Omega no estaba entendiendo nada – tú destinado ya tiene a alguien más, por eso tú marca está sangrando.

Sintió como si una parte de él hubiera muerto, como si la vida se le fuera llevado una parte de su alma y le dolía mucho, así que lo único que pudo hacer fue recostarse en el piso de azulejo para empezar a llorar.
Se había ido, dejandolo con un dolor que merecía.

Blue & Grey [HopeV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora