Blue & Grey [HopeV]

Capítulo 21

Creo que se merecen un maratón, así que les daré un maratón de tres capítulos. Los amo y espero disfruten.

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Maratón 1/3

Era bastante inútil, llevaba una semana, una semana desde que había empezado el cortejo, ya no sabía que más hacer, no tenía idea, cada día se estaba sintiendo peor, Rosé le había dicho que cuando empezará a sentirse así lo mejor sería tomar reposo, que no forzará su cuerpo, pero de todas formas iba a morir, así que lo mejor que pudo hacer fue preparar otra sorpresa para Hoseok.
Se había encontrado con un hermoso peluche, era una ardilla de color morado, decidió comprarla ya que le recordaba al alfa, fue a pasar por unas rosas, está vez le llevaría rosas, no le había comprado esa clase de flores, así que pensó que la mejor opción era elegir esas.
Siguió su rutina llegando al hospital, el chico ya lo conocía, su nombre era Seonwhga, también era coreano, además de que era muy amable, pero está vez fue diferente.

– Lo siento mucho, Taehyung – se disculpó de ante mano – el doctor prohibió la entrada a ti, nos dijo que solo venías a molestar así que dijo que no te permitieramos el paso.

El Omega solo le sonrió, le pidió al chico un papel con un bolígrafo, necesitaba escribirle una nota, solo que por un momento se mareo cayendo al suelo, las ganas de vomitar se apoderaron de su cuerpo, así que se levantó como pudo para dirigirse a un bote de basura para devolver todo, hasta que vio un líquido rojo.

– N-no puede ser – empezó a llorar, se le estaba acabando el tiempo.

– Oye, ¿Estás bien? – el chico se acercó al Omega, pero cuando vio aquel líquido en la basura, se dió cuenta que algo estaba mal – ¿Tú? No puede ser, ¿Rompiste la marca con tu destinado?

– Y-yo – no pudo contestarle cuando sintió otro mareo, haciendo que volviera a caer al suelo.

– ¿Tú alfa es Hoseok? – Taehyung asintio – ¿Por qué no le dices? ¿Cuánto tiempo tienes?

– No mucho, mi doctora dijo que cuando empezará a vomitar sangre, venía lo peor – empezó a llorar – por favor, no le digas nada a Hoseok, va a pensar que solo lo busco para que me salve, tengo que hacer las cosas bien – le entrego las rosas con aquel peluche – dile que vendré mañana, entregale esto y dale el papel, vendré mañana, dile que no me voy a rendir.

El enfermero lo vio con expresión triste, no sabía la razón por la cual el doctor Jung lo estaba rechazando, ese Omega llevaba toda una semana viniendo todos los días sin falta, siempre tratando de que lo recibiera, pero está mañana al entrar de turno, todos recibieron un comunicado de que no dejarán que aquel Omega peli-gris se acercará al hospital, tenía prohibido la entrada.
Así que después de despedirse del chico que se veía bastante mal, decidió entrar al consultorio del doctor, claro que cuando Hoseok lo vio no pudo buena cara.

– Creo que deje bastante claro que no quiero ver al Omega – le dijo con fastidio – así que si es para eso es mejor que te retires.

– ¿Él es tu destinado? – Hoseok levantó el rostro, mirándolo bastante confundido – ese chico es tu Omega destinado.

– Me imagino que el te lo dijo, que él sea mi destinado no quiere decir que estemos juntos – volvió a su trabajo – si no tienes nada más que decir, sal de mi oficina.

– No me gusta entrometerme en asuntos de pareja, porque no se cómo fueron las cosas para los dos – se acercó entregándole los detalles que había dejado el Omega – solo espero, que no sea demasiado tarde cuando aquel Omega decida abrir la boca.

– ¿De que estás hablando?

– Eres doctor, yo creo que sabes muy bien de lo que estoy hablando – le entrego aquel papel – él dijo que vendría mañana, que lo haría sin falta, solo le pido que no sea tan duro con él, lo está intentando.

– Yo también lo intente, así que es mejor que no te entrometas – le dijo bastante serio.

– Solo le pido, que no se vaya a arrepentir de esto, es un buen chico, por lo que puedo ver en sus ojos a pasado por mucho dolor, lo que creo es que ustedes dos necesitan darse la oportunidad de hablar, la comunicación también es importante.

Y con eso aquel enfermero salió del consultorio, dejando a Hoseok pensando por aquellas palabras del chico, puede que tenga razón, puede que no tuvieron la oportunidad de hablar, de que Taehyung le explicará lo que había hecho mal, que le dijera que era lo que pasaba, siempre que intentaba de acercarse él Omega le decía algo hiriente.
Solo de pensar en todas esas cosas que le había dicho el Omega, de recordar cada frase hiriente que soltó sin importar sus sentimientos lo hizo enojar, tomando aquellas rosas para tirarlos al cesto de basura que tenía en su consultorio, vio aquel peluche con odio para también tirarlo junto a las rosas y aquel papel no tuvo la molestia de leerlo, simplemente lo rompió para tirarlo, no quería saber nada de Taehyung, tuvieron la oportunidad y él simplemente la desperdicio, era el fin, ya nada le importaba.

(...)

Taehyung llegó a casa algo cansado, ya no tenía fuerzas de nada, saludo a Momo pero está lo miro con asco, no quería verse grosera, pero el olor del Omega se había vuelto bastante podrido, cuando Taehyung se acercó a su bebé este comenzó a llorar pidiendo ser alejado de su madre, aunque al pequeño cachorro le doliera separarse de su mami, no podía soportar aquel aroma a podrido.
Taehyung en ese momento sintió su corazón doler, así que empezó a llorar.

– Lo siento, lo siento mucho – salió de la habitación para encerrarse en el baño, tomo su celular para marcarle a Rosé – está pasando, hace una hora vomité sangre y ahora mi pequeño bebé no se me quiere acercar ¿Cuántos días?

– Una semana por mucho, lo siento – la chica empezó a llorar – no quiero que mueras, Tae.

– Es mi culpa ¿Recuerdas lo que dije? ¿De que si algo pasaba le dieras el bebé a Hoseok?

– Si, lo recuerdo bien.

– Entonces ya sabes que hacer, lo siento – con eso colgó la llamada.

No había nada que hacer, este era el final para él.