Taehyung se levantó horas después, sintiendo el aroma a chocolate, al ver aquella prenda que no era de él sabía muy bien de quién era aquel olor, había venido, él había venido, sus lágrimas no tardaron en salir de sus hermosos ojos, sintiéndose demasiado feliz. Pero, luego recordó todo lo que había pasado, sintiendo las ganas de vomitar llenar su ser, no podía hacerle eso, su mundo se estaba viniendo abajo y ya no sabía que hacer.
Pasado.
Llevaba días sin hablar con nadie, llevaba días sintiéndose completamente solo, ya no tenía a nadie, ni Namjoon podía soportar su olor, así que decidió alejarse de todo el mundo, necesitaba estar solo y lo estaría por un largo tiempo.
Claro que estar mucho tiempo en completa soledad podría ser muy dañino, para ser alguien que no había tenido ni un poco de amor, que solo soñaba con que alguien lo abrazara, que le diera esos besos en la frente que te hacían sentir seguro, soñando con un amor como el de las películas o los libros, soñando con encontrar a su destinado, pero, eso jamás iba a pasar o a menos no le iba a pasar a él.
Así que la mejor opción que tenía era obtener el amor a la fuerza, solo por una vez quería sentirse amado, quería sentir la calidez de un cuerpo junto al suyo y no de la manera en la que habían hecho aquellos alfas con él, quería ser tomado con amor, con mucho amor. Se dirigió a aquel hotel donde había citado al alfa que robaba sus suspiros, estaba dispuesto a todo, claro que cuando lo vio en su motocicleta y con aquellos tatuajes en su brazo, aquel piercing en su labio, su corazón latio de mil maneras diferentes.– Jungkook – le sonrió, pero el alfa simplemente se cubrió su nariz, mirándolo con asco – seré rápido, lo prometo.
– Eso espero, no soporto tu maldito olor – el pelinegro no quería ser tan duro con el pequeño Omega, pero le era inevitable, su lobo se apoderaba de él cada que sentía el olor de Taehyung.
Taehyung asintio, dirigiendose hasta una mesa para tomar un café, pero, Taehyung ya le había pagado a alguien para que le pusiera una droga que hacía que los alfas entrarán en celo, una droga que les nublaba el juicio, quería un cachorro y quería un cachorro de Jungkook, así que espero el momento en el que el alfa tomo hasta la última gota de aquella bebida.
Con una sonrisa en su bello rostro se dirigió hasta el alfa, tomándolo del brazo para pedir un taxi, ahora se dirigían a un hotel bastante cercano, lo que jamás espero Taehyung es que aquella droga sacará lo peor del pelinegro.– ¿Me drogaste? – lo miro enojado – ¡Maldita perra! – se acercó para darle una cachetada – ¡¿Te parece divertido?! ¡¿Cuántas veces tengo que rechazarte para que me dejes en paz?! – lo tomo fuerte del cabello – me das asco, no hay algo de ti que me guste.
– Y-yo – Taehyung empezó a temblar – pensé que me querías, siempre eras tan bueno conmigo – las lágrimas empezaron a caer por esos hermosos ojos que tenía, viendose reflejado aquella treiteza que cargaba – Jungkook, solo dame una oportunidad, prometo ser un buen Omega.
– ¿Un buen Omega? ¿Un Omega usado como tú? – eso rompió el corazón de Taehyung – nadie va a quererte, ni siquiera tú destinado va a hacerlo, maldita perra.
Taehyung sentía como todo se había acabado para él, viendo como Jungkook luchaba contra el efecto de la droga, ni siquiera drogado podrían amarlo, así que se rindió.
Actualidad.
Recordar eso hizo que todo en su ser se revolviera, puede que Jungkook tuviera razón, puede que nadie lo quisiera, de todas formas estaba usado, estaba bastante usado.
Tae, eso no es así.
Su lobo había despertado, después de tanto tiempo, estaba hablando con él otra vez.
Taehyung, Hobi si te ama, la menera en que te hizo el amor el día que te marco.No es cierto, estás mintiendo, porque ese día fueron ustedes los que tomaron el control, Hoseok no me tocó jamás, fue su lobo el que te toco a ti, no a mí.
¿Quien podría amarme así?Miro aquel abrigo, tomándolo entre sus brazos para luego abrazarlo, aspirando aquel aroma a chocolate, sintiéndose vivo, sintiendo que volvía a la vida, que no estaba solo, que aquella soledad que sentía se esfumaba.
Si, él anhelaba con todas sus fuerzas que Hoseok estuviera con él, anhelaba en lo más profundo de su ser que ese alfa estuviera para él, pero no podía ser egoísta, no se permitiría pensar en si mismo, cuando sabía muy bien que Hoseok haría lo mismo que han hecho todos los alfas, lo alejaría cuando se enterara que ya fue usado por muchos, que fue abusado tantas veces que lo rompieron por dentro.(...)
Hoseok se encontraba afuera de aquella habitación con algunas mantas que había traído de su casa, no se había separado de aquel lugar desde que se enteró que Taehyung estaba fuera de peligro, pero hasta que el Omega no saliera de aquel hospital no lo dejaría solo, no importaba si tenía que dormir en el suelo, no importaba si después su espalda o su cuerpo doliera. Solo tendría que estar ahí, solo tendría que permanecer en ese lugar para que nada malo pasará, no se perdonaría jamás si algo más llegará a pasarle a Taehyung.
– Hobi – Seokjin se sentó a su lado – debes ir a casa, debes descansar.
– No, está es mi casa, mi casa siempre será donde esté Taehyung – el Omega lo miro con desaprobación – así me mires de esa manera, no me alejaré de él, no lo haré y no me importa lo que digan, solo necesito estar a su lado, es lo único que me mantiene vivo.
Seokjin simplemente le sonrió, no quiso decir una palabra más, pero muy en el fondo sabía, que cuando Taehyung se enterará lo que estaba haciendo Hoseok, lo iba a herir, lo iba a hacer sufrir una vez más.
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Blue & Grey [HopeV]
FanfictionTratar de lidiar con un embarazo solo después de romper el lazo con tu destinado no era fácil, claro que Taehyung no lo pensó dos veces para romper aquel lazo haciendo que ambos, tanto el como Hoseok sufrieran. ¿Podrá con tanto dolor? o simplemente...