Blue & Grey [HopeV]

Capítulo 25

Después de una hora Taehyung decidió ir a casa, ya se sentía mucho mejor, hace tiempo que no se sentía tan bien, era como si todo hubiera sido un mal sueño, dónde había despertado de tantas pesadillas para ser feliz, sabía muy bien que todavía tenía que remediar todo el daño que le causó a Hoseok, pero haría todo lo que estuviera a su alcance para ganarse el corazón del alfa.
Se dirigió a casa donde Momo lo recibió con una sonrisa entregándole al bebé, su hijo rápidamente hundió se naricita en su cuello, su madre ya no tenía feromonas feas, ahora tenía una combinación de caramelo y chocolate lo que hizo que empezará a buscar su pezón, Taehyung se separó un poco, todavía tenía miedo de darle de su pecho, puede que ahora estuviera mucho mejor, pero no quería hacerle daño a su bebé. Así que tomo su celular para poder llamar a Rosé.

– Tae – la chica estaba llorando – Dios, no quiero perderte, no mereces algo así.

– Tranquila, está bien, todo ya está bien – trato de tranquilizarla – Hoseok me marco.

– ¿Qué? ¿Hablas enserio? – ahora la rubia se escuchaba entre aliviada y emocionada – oh, Tae, dile a ese alfa que lo amo con todo mi corazón.

– Ya basta, te recuerdo que es mi alfa – le reprochó – lo que quiero preguntar es ¿Le puedo dar leche a Taehyun?

– Por el momento esperemos unos días, es demasiado pronto, así que es mejor ir poco a poco, en unos días empiezas a amamantarlo y ya miraremos cómo va el proceso – le explicó la chica – me alegro por ti, Tae, me alegra que ya te dieras cuentas que mereces ser amado y ese alfa es lo mejor que pudiste encontrar.

Claro que era él mejor alfa, siempre soño en encontrar a alguien que lo amara, sabía muy bien que había echo algunas cosas mal, pero, sabía muy en el fondo que todo estaría bien, que por esta vez todo estaría completamente bien.
Así que después de hablar con Rosé, arrullo a su bebé en sus brazos preparándole su biberón, al principio su bebé no quería recibirlo, pero al esparcir sus feromonas el bebé se resigno recibiendo aquella leche asquerosa, hizo un puchero mirando a su mami, todavía no entendía porque no podía tener el pezón, su mami ahora olía muy bonito.

(...)

Horas después decidió preparar la cena, Momo estaba encantads de que el Omega estuviera cocinando, desde que había probado de su comida, había quedado fascinada. Momentos después decidió hacer un delicioso postre de fresa, estaba tan esmerado preparando todo que no escucho cuando alguien tocó, así que la beta decidió abrir.

– ¿Hobi? – Momo se avalanzo hacia los brazos del alfa – no sabía que estabas aquí, ¿Por qué no me dijiste?

– No tuve tiempo de visitarte, lo siento – la abrazo – estás hermosa, pero, ¿Taehyung vive aquí?

– Se está quedando por un tiempo – está lo miro confundido – no puede ser – ahora lo miro sorprendida – ¿Eres el alfa que Tae a estado cortejando? ¡Oh, Hobi! ¡Eso es muy lindo! – salto emocionada – él es un Omega tan lindo y tierno, además de que cocina bastante bien, es más cocina delicioso, ¿Probaste el platillo que te hizo hace días? Debiste quedar bastante enamorado – Hoseok no podía decirle que ese día lo había tratado muy mal, al parecer Momo no sabía el pasado de ellos dos – además que te está cocinando justo ahora, Hobi eres tan afortunado.

– Al parecer si – se quitó los zapatos para adentrarse a la casa – ¿Y dónde está?

– Oh, tontito – le pegó suavemente en el hombro – en la cocina obviamente – le sonrió.

El alfa se dirigió a la cocina, al verlo de espaldas caminando de un lado a otro, buscando los ingredientes para seguir cocinando, después de esparcir sus feromonas el Omega se giro, sus ojos se posaron en los lindos ojos de su alfa, así que se acercó para abrazarlo.

– Hola – beso su mejilla, Hoseok no sabía cómo sentirse al respecto.

– Mi lindo Omega – Taehyung se sonrojo – te ves hermoso, así que... ¿Que estás preparando para mi?

– Bueno, un poco se sushi – le mostró lo que estaba preparando – espero te guste.

– Tae – le entrego una tarjeta – hable con un amigo mío que es psicólogo, él podría ayudarnos, porque aunque te ame, mi dulce Omega – acarició sus mejillas – aún me es difícil.

– Lo entiendo, nunca es fácil a la primera – se alejo para buscar las flores que había comprado – las compré para ti, Hobi.

Hoseok quería besarlo en ese momento, solo quería fundirse en sus labios, pero, por el momento lo mejor era esperar, esperar un poco más a qué las cosas sean más llevaderas, solo se acercó para besar con dulzura su frente.

– Gracias – el bebé soltó una pequeña risa, que hizo a Hoseok acercarse a su carreola – oh, así que este es mi precioso hijo – Taehyung asintió, a lo que el alfa lo tomo en brazos, el bebé sujeto la camisa de su padre, hundiendo su rostro en el pecho de Hoseok – es la cosita más tierna, mi tierno omeguita – acercó su bebé al rostro para rozar su nariz junto a la de él – eres la cosita más hermosa ¿Quien es el bebé de papá? ¿Quien es el pequeño omeguita de papá? – el bebé sonrió tomando las mejillas de su papá.

Después de ese tierno momento, decidieron que era mejor cenar, Momo estaba demasiado encantada con la comida del Omega que no dejaba de halagarlo, además de que Hoseok estaba amando como cocinaba Taehyung, al llegar al postre Hoseok se enamoro más de él.
Pasada ya unas cuantas horas, Hoseok decidió que era tiempo de irse, lo que no espero fue que su pequeño bebé comenzará a llorar, no quería que su papá se fuera.

– Oh, bebé – Taehyung lo tomo en brazos para arrullarlo – papá tiene que irse, amor.

– Puedo quedarme hasta que se duerma – se ofreció acercándose al bebé para besar su frente.

Los tres se dirigieron hacia la habitación donde se estaba quedando el Omega, este se alejo un momento para darle un baño al bebé, después de que lo vistió ya estaba listo para dormir, lo recostó en la cama para darle del biberón.

– ¿No lo puedes amamantar? – pregunto Hoseok acariciando la cabeza de su hijo.

– No, aún toca esperar unos días – le sonrió – pero, ya deseo hacerlo – esparció de sus feromonas, lo que hizo que el pequeño Taehyun cerrará sus ojos – Hobi – susurro – no me rendiré, me voy a ganar tu amor y haré que olvides todo lo malo que te hice.

– Se que si, Tae – se acercó para besarlo, ya no podía resistirlo más – haremos esto juntos de ahora en adelante, te amo.

– Yo también, cielo – acarició sus mejillas.

Ambos sabían que no era fácil olvidar, pero, estaban seguros que podían seguir, solo que necesitaban algo de tiempo.