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Han pasado dos semanas desde que tengo nuevo departamento, al día siguiente de adquirirlo compre un colchón bastante cómodo y gracias a Lexie ahora tengo un sofá grande y en excesivamente cómodo, también una pantalla pequeña para no aburrirme durante mis tiempos libres, sobre los demás muebles o la decoración por ahora están en espera ya que es eso o la despensa. Con respecto a la gente con la que he coincidido es amable, el edificio esta muy cerca de la empresa y puedo llegar más rápido, algunas veces incluso he ido caminando.

No he hablado ni con Sasha ni con Julia, mi madre ya intento en varias ocasiones hablar conmigo pero simplemente me he negado a responder el teléfono, seguramente quiere saber donde estoy para venir y obligarme, o mejor dicho persuadirme para volver a vivir con mi hermana. Estoy tranquila y no me hace falta la compañía de Sasha.

—Hola. —mi novia también es una constante en mi vida y agradezco su compañía para no sentirme tan sola en este proceso de separación familiar. —Te extrañe. —susurró antes de besarme.

—Yo también te extrañe. —el viernes la vi por la mañana y dijo que tenía que hacer un viaje de negocios, entendía aunque no quería dejarla ir porque ya teníamos planes para este fin de semana.

—Lo del viaje fue un imprevisto y quiero disculparme por cancelar...

—No pasa nada, entiendo. —la interrumpí, el viernes ya se había disculpado lo suficiente y si eso no bastó no se canso de enviarme mensajes de disculpa durante todo el viernes y también durante el sábado, e incluso hoy por la mañana. —¿Que tal si hacemos un domingo de películas? —propuse para quitarle esa preocupación de encima, no quería que pensará que estaba molesta. Si lo estuve en su momento pero ahora ya estaba conmigo, debe de estar cansada por las horas de viaje, el poco descanso y aún así vino a buscarme. —No tengo muchas ganas de salir y creo que te vendría bien que nos quedemos para que descanses un poco.

—Si, la verdad no tengo mucha energía para estar fuera y soportar extraños. —nos sentamos en el sofá y de inmediato cerro sus ojos. —¿Pido algo para comer? —preguntó cuando me levante para ir por una manta.

—¡Si! —le grite para que escuchara.

—¿China o pizza? —dijo sacando su celular.

—China. —dijimos las dos al mismo tiempo. Llamó y luego nos acomodamos mientras buscaba una película.

—¿Que tal el viaje? —pregunte antes de comenzar la película.

—Fue bueno, se negocio un excelente patrocinio que será bueno para ambas partes. —aseguró, fue algo cortante y supuse que no quería hablar más de trabajo. —¿Como te fue en estos días? —preguntó cambiando de tema.

—Bien, no hice mucho la verdad. —le dije recostado mi cabeza sobre su hombro. —Mañana tenia pensado ir a inscribirme y entregar mis papeles para la beca. —explique.

—¿Quieres que te acompañe? —preguntó de inmediato, lo cual me sorprendió. —Digo... seguramente quieres hacerlo sola... —comenzó a divagar. Me acerque y deje un beso en su mejilla y luego en sus labios.

—¿Quieres acompañarme?

—Si tu quieres, por supuesto. —susurro pasando su brazo sobre mis hombros. —Pero entiendo si quieres ir sola, solo es...

—Me encantaría, Lexie. —volví a unir nuestros labios, últimamente hemos tenido sesiones de besos que se ha puesto demasiado intensos. Y esta vez no fue la excepción hasta que mi teléfono comenzó a sonar y Lexie se alejó.

—¿No vas a contestar? —me levante por mi teléfono que estaba en la cocina. Otra vez era mi madre.

—Es Julia. —le dije cuando me senté entre sus piernas recostando mi espalda en su pecho. —No ha parado de llamar, en la última semana se está volviendo demasiado intensa. —envolví sus manos que estaban en mi estómago con las mías y Lexie posó su barbilla en mi hombro.

Tequila; Puro amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora