#8. Recuerdos perdidos

2.9K 288 16
                                    

—Yuki, ¿hablas en serio?

No se si la pregunta la ha hecho Nami o la he hecho yo. Estoy tan absolutamente en shock. ¿Tengo una hermana?

—Eres exactamente igual que el recuerdo que tengo de mi madre. Eres tú. Hana Crawford.

—¿C-crawford? No. Yo soy Hana Morgan.

Yuki suspira, mirando al techo como si estuviera buscando alguna forma de demostrarme que dice la verdad. Baja la cabeza de golpe y me mira con los ojos muy abiertos.

—¿Alguna vez lo has abierto? —pregunta Yuki, esperando con ansias mi respuesta.

—Ni siquiera sabía que se podía abrir.

Extiende la mano, esperando que le de el collar, que abre del lateral y revela el interior, una imagen de una familia de cuatro personas con una pequeña versión de mi misma delante de la madres y una niña pequeña que se parece muchísimo a Yuki delante del padre.

Esto no tiene sentido.

—P-pero no recuerdo a esta niña, ni a estas personas. Pero esta.. soy yo.

—Tenías tres años cuando te perdí, es normal que no recuerdes nada —explica Yuki, dejándome aún más estupefacta que antes.

—¿Tres? Tenía cinco años cuando mis padres murieron.

Yuki abre su collar, para que vea la misma foto, algo más desgastada que la de mi collar, pero la imagen es exactamente la misma.

—Déjame que te cuente la historia como yo la recuerdo. Y luego me preguntas las dudas que tengas.

>>Tú tenías tres años y yo ocho. Mamá y papá eran miembros de la nobleza, no tenían un título muy importante, pero eran lo suficiente ricos para no tener que preocuparse de trabajar. Mamá se encargaba de cuidar a los niños de Shells Town cuyos padres se pasaban el día trabajando. Se aseguraba de que comían y estaban a salvo en caso de que vinieran los piratas. Siempre cuidando a los demás.

>>Papá, en cambio, quería hacer algo más por la isla. Estaba trabajando en un nuevo plan de refuerzo para evitar ataques en la ciudad. Él protegía al pueblo por fuera, y mamá por dentro.

—Qué personas más maravillosas debieron ser —dice Nami, agarrándome con fuerza de la mano.

—Lo eran. Eran los mejores padres del mundo. Eran tan buenos que me dejaron venir aquí a estudiar arquería con el tío Hideo cuando cumplí los ocho.

—Por eso tú no estabas en el naufragio —murmuro, comprendiendo más cosas a cada momento.

Yuki asiente antes de seguir con su historia.

—Se acercaba mi cumpleaños y papá mandó una carta al tío Hideo. Al parecer alguien en Shells Town no estaba muy de acuerdo con el plan de protección de papá y quería deshacerse de él.

—¿Por qué? Él quería salvar a la gente de los piratas.

—Y algunos piratas —prosigue Yuki mirándonos tanto a mi como a Nami—, trabajan para los marines.

Sin que tenga que decir nada más, las cosas tienen sentido. Si los piratas no podían entrar en Shells Town, y ayudar a los marines de la manera que sea, los marines salen perdiendo y su reputación queda en entredicho.

Y sé, sin necesidad de pensar demasiado, alguien que habría salido muy mal parado si los marines fracasaban en Shells Town.

El mismo hombre que me ofrecía a otros.

—En la carta, aparte de decir eso, también decía que habían conseguido un barco, metido todas las cosas de valor dentro y que partirían rumbo a Villa Syrup tan pronto como se calmara la marea. Pero el barco nunca zarpó...

Written in my soul - Roronoa Zoro (OPLA) [REVISADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora