#79 #BPOV
Maïa estaba no se donde.
Papá estaba trabajando.
Andrew... No lo sé, pero no lo necesito ahora.
Mi única opción era Joe.
Tomé mi teléfono y lo llamé.
-Brendster*! ¿Qué pasó?- dijo con alegría.
-Ando aburrida, vamos a tomar un helado o algo así, ¿sí?
-Bueno, hay una fiesta esta noche, que se dice que será épica, ¿quieres...
-¡Si, vamos! - le grité antes de que terminara la pregunta.
-Está bien, paso por ti en quince. - y colgó.
Me puse una simple musculosa negra y unos jeans pegados de mezclilla junto a unos converse negros.
Me arreglé el cabello y me maquillé un poco.
A los quince minutos Joe ya estaba afuera de la casa de Maïa, ya que yo me había negado rotundamente a regresar a casa.
-Hola.- dije cuando subí a su Mercedes rojo.
-Hola, te ves muy linda. - dijo, sonrojándose.
Aw, ternurita.
-Gracias.
Manejó hasta el otro lado de la ciudad, en donde estaban las grandes casas.
-No entiendo como nos colaremos a una fiesta de riquillos. - dije, mientras paraba en una gran mansión, que destilaba gente sofisticada.
-Mira, esperaremos a personas acá y después que seamos muchos atacaremos. Según lo que se, son puros de nuestra edad, pero son unos amargados.
Suspiré.
-Pensé que eras un tipo bueno.
-Lo soy, pero no soy idiota, no me perdería una fiesta como ésta nunca. - sonrió.
Quince minutos después, unos 100 chicos estaban fuera de la mansión, todos riendo y bebiendo.
-¡ES LA HORA!- gritó un chico de no se donde, y todos entraron.
Yo solo caminé de la mano de Joe, ya que no me sentía segura de nada de ésto. Está bien, me había emborrachado un par de veces, pero era con gente que conocía, y que estaba con Maïa y ésas cosas, pero ahora solo estaba con Joe rodeada de chicos extraños.
Cuando entramos a la gran casa, me llevé una gran sorpresa; era muy elegante, sí, pero todo estaba decorado con pequeñas lucecitas de navidad, ya había humo y la mayoría de los chicos estaban vestidos casualmente.
Suspiré aliviada y le solté la mano a Joe.
La música era agradable y no retumbante como siempre lo era, era buena música.
-¿Quieres algo de tomar? - dijo Joe
-Oh, claro. Estaré sentada en las escaleras.- dije señalando las grandes escaleras, de ésas que son típicas en las películas que involucran princesas y ésas cosas.
El asintió y se perdió entre la gente.
Me iba a sentar en el último escalón, pero estaban muy concurridas las escaleras, así que las subí todas y me recargué a la pared y me distraje mandando un SMS a Maïa.
-Hola, que sorpresa verte por aquí. - me dijo una voz extremadamente conocida.
Levanté la mirada y me lo encontré a centímetros de mí.

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The Bet.
Fiksi Remaja"...-El último reto va a ser para... Andrew. - dijo Doyle. Todos estaban muy borrachos, yo tenía alcohol en la sangre, pero no como ésos idiotas. Todavía sabía como me llamaba y a que numero llamar en caso de emergencia. -Anda pues, ponlo.- dije cr...