BAE ; Jungkook

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Flashforwards

Jungkook

—¡Ella no ha contestado Hyung!

—Hablaste con su mamá —reí amargamente y asenti—. ¿Te dijo algo?

Me incorpore mejor, trague con dificultad—. No me quiere ver ni en pintura Hyung, menos su padre, ¡Ah!

—Créeme que ella tampoco me ha querido decir en donde esta —él golpea un poco mi espalda como compartiendo mi dolor.

Escuchamos como la puerta suena, él me mira pidiendo mi autorización, hago un ademán para que vaya, se levantan apresurado y abre la puerta, escucho como se saludan para después notar como viene hacia donde me encuentro. Le miro esperanzado para saber si sabe algo de ella, pero su amiga niega dejándome en una ten agonía

Siento mis ojos arder a la impotencia.

Te extraño Hae, mi dulce manzanita.

—Ay no llores, la vamos a encontrar —me dice su amiga con un tono compasivo en su voz.

Mi amigo luego llega sentándose a mi lado, yo en busco de protección lo abrazo—. Ya, tranquilo, Jungkook... —susurra Jimin sintiendo como su mano toca mi espalda,

Estoy acabado sin ella, la necesito a mi lado.

Actualidad

Problemas

Un mes después

Es hora del almuerzo y la cafetería estaba más llena de lo normal y eso provoca que me estrese un poco. Con Jungkook nos encontrábamos sentados en una mesa un poco alejada del caos, él al afrenta de mi mientras revolvía su comida... como si estuviera ajeno a la realidad.

¿Por qué siempre le pasaba lo mismo en la universidad?

—¿Jungkook?

Trato de llamar su atención, pero no él no hace nada, solo esta ahí sin expresión ninguna y con su mandíbula apretada.

—¡Jungkook —eleve un poco mi voz.

Su mirada cae en mí, mostrando un cierto enojo. Suspiro y se acomodó bien en la silla.

—¿Que pasa Hae? —me dice sonando un poco hostil, como si estuviera enojado conmigo, se cruza de brazos.

—Te estoy hablando hace rato y al parecer no me has escuchado —suspiro rendida.

—Estaba ocupado Hae —responde y empiezo a reír amargamente—. ¿De qué te ríes?.

—Me dices que estas ocupado... pero no te veo haciendo nada  —digo ironica y empiezo a comer—. No estás haciendo nada importante —me encogo de hombros.

—Sabes....ya arruinaste me apetito... —suspira—. Eres una molestia a veces...

¿Como dijo?

Le miro dolida por lo que acaba de decir sintiendo mis ojos arder. Lo único que hago es querer ayudarlo y hacerlo feliz. Con la mirada aún en él y apretando mi lengua para no llorar y le veo tomar sus cosas para alejarse de mi.

Por alguna razón siento miradas en mi espalda, y guire mi rostro encontrándome con Sook viéndome atenta. Apreté mis dientes molesta por la mirada que me da, siento que se burla de mi persona.

Molesta tome la mitad de mi almuerzo y lo tire a la basura, se me quito todas las ganas de comer.

Llegué al baño para mojarme la cara, no falto poco para arrugar mi expresión y darle la bienvenida a las primeras lágrimas. ¿Soy ua molestia para bae? ¿Tan castrosa soy con mi novio para que me dijisera eso?

¿Por qué me duele el corazón?

La puerta del baño se abre con fuerza, no me importa quien podía ser, prácticamente me sentía tan metida en mis pensamientos que no sentí cuando unas manos abrazaron mi cintura. Lo vi a través del espejo y saqué un doloroso sollozo.

—Hae, preciosa, lo siento —susurra en mi oído, haciendo que llorará aún más—. Mírame por favor, no fue mi intención hablarte así —me abrazo más fuerte de la cintura.

En un rápido moviendo me güito hacia él con el rostro preocupado. Sus ojos de color café oscuro estaban rojos. Lleve mi mano hacia su pecho para alejarlo de mi, y sentí su corazón agitado, no sé si era por venir corriendo o porque realmente quiere llorar.

—Mi Hae, no llores por favor, me haces sentir un jodido miserable —habló sonando suave y preocupado, limpiando mis ojos con sus pulgares.

—Eres un tonto. Si tanto quieras estar solo me lo hubieras dicho.

—Sinceramente lo siento, lo dije sin pensar en tus sentimientos preciosa —toma mi rostro entre sus manos.

—¿Esto es por ese chico?

Desde que apareció ese chico Jungkook esta completamente raro en la universidad. Era uno cuando estábamos junto y otro en la universidad, no era el mismo que cuando empezamos andar.

Bae me sonrió de apoco—. No es por eso Hae. No tuve una buen despertar, había peleado con mis padres y mi enojó acumulado lo descargue en ti. En serio perdóname dulce manzanita

Simple lo abracé, uniendo mi cabeza en su cuello y llore en silencio. Y Jungkook repetía: lo siento, perdóname, te amo mucho Hae.

Así que unas horas después estábamos nuevamente juntos y claramente él se comporto muy amable conmigo. Le pedí que si realmente quiere estar solo que me lo dijera, en total yo comprendería. Lo menos que quiero hacer es ser un una molestia para él. No quiero ser de esas novias castrosas.

Al terminar las clases bae me fue a dejar a casa y me dijo muchos te amos, provocando alterar mi  corazón. Me dio un dulce beso y al momento de salir de su auto:

—Nos vemos mañana, te amo manzanita.

Cuando entre a casa solamente pude sonreír como tonta. Era como si lo sucedido en la cafetería no hubiera pasado.